Trabajadores de la Delegación de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta se concentraron ayer, convocados por el comité de empresa (formado por CSIF, Ustea, CCOO y UGT), para mostrar su preocupación en relación a los recortes en este departamento. La protesta se celebró junto a la Delegación. El comité denunció los crecientes problemas en los centros de servicios sociales dependientes de la Junta, entre los que se encuentran la residencia del Parque Figueroa, los centros de menores, los centros de participación activa, el Centro de Valoración y Orientación y la propia Delegación. Los representantes de los trabajadores consideran un "error" que este departamento, con su titular, María Isabel Baena al frente, "entienda las relaciones laborales como un mero trámite contemplativo en lugar de como una verdadera negociación para la reactivación económica y creación de empleo". Los sindicatos lamentaron la pérdida de derechos que año tras año vienen sufriendo los cerca de 400 empleados de la Delegación, "a los que se suma el incumplimiento reiterado del convenio colectivo y de instrucciones relativas a jornadas laborales, vacaciones y permisos".
