Auténticos. Así son los miembros de Medina Azahara y así se mostraron ayer en el que será uno de los pregones a las fiestas de mayo más emocionantes de la historia de Córdoba. El salón de los mosaicos del Alcázar se convirtió ayer en escenario de un recital de rock en el que Medina Azahara hizo lo que mejor sabe hacer, música de la buena con letras dedicadas a su eterna musa, la ciudad de la Mezquita. Sí, de la Mezquita, sin rodeos. "No me imagino diciendo 'Paseaba por la Catedral/estuve un tiempo en silencio' en vez de 'paseaba por la Mezquita'", reconoció el cantante del grupo en referencia a la letra de una de sus canciones, "así la escribimos en el año 78 y así la seguimos cantando". Con ese tema abrieron la sesión y con Córdoba, Siempre estarás en mí y Todo tiene su fin la completaron, intercalando entre canción y canción toda clase de piropos a su ciudad querida ("de todos los premios que hemos recibido, el que siempre hemos llevado más a gala es el de Cordobeses del Año, ahora también recordaremos haber sido pregoneros del mayo cordobés, aseguró Martínez) y guiños propios de rebeldes indomables. Cuatro temas, cuatro pesos pesados del rock andaluz bastaron para poner en pie al público asistente, rendido ante la genialidad de los que desde hace más de treinta años son los mejores embajadores de Córdoba en el mundo de la música. "Gracias por este privilegio y que seáis muy felices y tengáis mucha paz, mucho amor y mucha libertad", dijeron antes de despedirse.

Acabado el concierto, el alcalde de Córdoba, José Antonio Nieto, tomó la palabra. Y si sembrados estuvieron ellos, sembrado estuvo el alcalde. "Yo había escrito una cosa, pero después de escuchar a Medina Azahara en directo, no me vale", empezó, para después relatar cómo se fraguó la idea de elegir a Medina Azahara para pregonar las fiestas, cómo descubrió a su hija la música de este grupo y cómo sintió que nadie mejor que ellos para esa misión cuando "al pedirles que fueran los pregoneros, hicieron lo que hace la buena gente, que cuando le pides un favor, te da las gracias". Entre otras anécdotas, recordó la advertencia de Manuel Martínez al alcalde: "Es posible que en julio actuemos en la fiesta del PC en Madrid", para terminar asegurando que "mientras yo sea alcalde, el pregón no lo hará nadie por un carnet de partido, sino gente que quiera a Córdoba, que tenga algo que decirle y sepa cómo y que lo haga con ganas y agradecido". Para rematar la faena, se les hizo entrega de un retrato colectivo de José Luis Muñoz.