Las aguas parecían volver ayer lentamente a su cauce en los tres bloques de la urbanización de Parque Azahara, junto a la gasolinera de la carretera de Palma del Río, que la madrugada del martes sufrió numerosos intentos de asalto para ocupar algunos de los pisos que aún no se han vendido y que por la tarde registró durante unos minutos la ocupación de una de las viviendas. Sin embargo, la constructora de los bloques, Vimpyca, puso ayer vigilantes jurados para reforzar la seguridad y, sobre todo, tranquilizar a los residentes, que habían calificado los hechos de la madrugada del martes como un "asalto coordinado" en toda regla por parte de decenas personas llegadas desde el entorno del barrio.

Los incidentes, aunque sin desaparecer (un vigilante fue objeto del lanzamiento de piedras, informan vecinos), fueron limitados en la jornada de ayer, mientras que los residentes pudieron volver a sus trabajos y se organizaban para solicitar y mantener reuniones con diversas autoridades para informarles del problema y recabar ayuda.

Hay que recordar que a lo largo del martes muchos vecinos, por temor a que ocupasen sus propias viviendas, permanecieron en sus pisos turnándose y en ocasiones teniendo que dejar de acudir a sus trabajos, todo ello después de una madrugada en la que estuvieron en vela mientras se intentaba entrar por la fuerza en los bloques. Los residentes mantuvieron las luces encendidas y las persianas y cortinas descorridas para dar a conocer que en sus pisos vivían familias y no sufrir una invasión.

Por su parte, el subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, reconoció ayer los hechos y elogió el papel de la Policía Nacional, que respondió siempre con prontitud a la llamada de los alarmados vecinos y que evitaron con su presencia mayores problemas.

Primo Jurado, por otro lado, señaló que las viviendas "son de protección oficial propiedad de la Junta de Andalucía", por lo que "se ha informado a la Unidad Adscrita de Policía a la Junta para que tome medidas de seguridad". La urbanización, sin embargo, son de VPO construidas por una entidad con fin social (Vimpyca), que tiene carácter privado y nada tiene que ver con el parque de viviendas sociales, que sí depende directamente de la Junta. Capítulo aparte, Primo Jurado afirmó que la Policía Nacional permanece vigilante y con una fuerte presencia en la zona "como medida preventiva", ofreciéndose a los vecinos de Parque Azahara para celebrar una reunión en la que poder "informarles y tranquilizarles", ya sea en la sede de la Subdelegación o en el barrio.