8 mociones 8 fueron capaces de consensuar ayer todos los grupos municipales para celebrar el primer Pleno del mandato --¿y de la historia de la democracia?-- que sacó adelante por unanimidad todas las propuestas. El inusual consenso, además de hacer notoriamente más breve el Pleno (lo que agradecieron los asistentes en general y la prensa, en particular), ahorró enfrentamientos dialécticos y minutos que pudieron dedicarse a la despedida del concejal de Ganemos Alberto de los Ríos. Un adiós emotivo, en el que ningún portavoz escatimó elogios a la inteligencia y dedicación de este profesor de Secundaria, que vuelve ahora a su instituto. En su despedida, De los Ríos recitó a Pablo García Casado --se va el edil que recurría a la mitología griega en sus intervenciones-- y explicó que no se debe al cansancio, sino que «a veces hay que recolocarse y mi lugar, ahora, está en otro sitio». «Ganemos ha aportado aires nuevos, el ensanchamiento de la democracia, ha sido un proyecto capaz de ilusionar a muchos y tiene que continuar», añadió, al tiempo que llamó a trabajar «con altura de miras» por Córdoba.
