Unas 2.300 personas, entre alumnos y profesores, pertenecientes a 24 colegios católicos de Córdoba y provincia, se congregaron ayer en torno a la Torre de la Calahorra para realizar una especial peregrinación a través del Puente Romano y que concluyó en la Mezquita-Catedral para conmemorar el Jubileo de la Misericordia.
El Papa Francisco ha establecido que este Año Jubilar, que se viene celebrando desde el pasado 8 de diciembre de 2015 y que concluirá el 20 de noviembre de 2016, se dedique a la misericordia y al perdón. Los fieles podrán "ganar la misericordia" tras cruzar la Puerta Santa que cada basílica posee, idéntica a la de Roma, y que permanecerá abierta únicamente durante el Año Jubilar.
Puntuales, a las 10.00 horas, todos los escolares estaban preparados para comenzar la marcha, propuesta por la Diócesis cordobesa y coordinada por la Fundación Santos Mártires de Córdoba. Según destacó la secretaria general técnica de dicha fundación, "es un día muy grande para los católicos porque antes el jubileo se ganaba cuando se atravesaba la Puerta Santa de Roma y ahora tenemos la oportunidad de ganarla atravesando la puerta de la Catedral".
Al llegar a la Mezquita-Catedral, la Escuela Diocesana de Tiempo Libre Gaudium les había preparado a los alumnos de 3º y 4º de la ESO "un concurso sobre el año de la misericordia", según explicó el coordinador de Gaudium, Manuel Maestre. Explicó que el concurso era un cuestionario y que "los colegios ganadores optarán a un primer premio, que es un día de convivencia en Montilla", y un segundo premio que consiste en entradas para ver una obra de teatro organizada por el Centro de Idiomas Ways!.
Asimismo, se celebró una eucaristía presidida por el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, en la que dio la bienvenida a los centros escolares y en la que señaló la importancia de la educación católica y sus valores. Tras ella, escolares y profesores volvieron a los centros "tras una mañana de convivencia católica vivida con mucha alegría", según comentó la directora de la Fundación Santos Mártires, María Carbonell. Añadió que "ahora hay mucho fracaso escolar y problemas familiares" y que días así "se viven con la ilusión del perdón, de la solidaridad y la esperanza de que todo puede cambiar".
