Si vives en Córdoba, tienes entre 16 y 29 años y el año pasado estuviste entre los afortunados que firmaron un contrato laboral, lo más probable es que fuera para desempeñar funciones de peón agrícola o camarero asalariado. Esas fueron las ocupaciones más demandadas en la provincia, según el estudio sobre el mercado de trabajo de los jóvenes andaluces 2017 del Observatorio Argos, que refleja cómo de los 164.275 contratos registrados, un 31,37% fueron para emplear personal agrícola y un 16,61% para trabajar detrás de una barra o en un restaurante con la bandeja en la mano. En el tercer puesto del ránking de ocupaciones más contratadas, aunque a mucha distancia, se sitúan los vendedores en tiendas y almacenes (4,11%), los peones agropecuarios (4,11%) y los monitores de actividades recreativas y de entretenimiento (2,57%). En los últimos puestos, operadores de maquinaria agrícola, personal de limpieza y trabajadores cualificados también para actividades agrícolas. El resto de profesiones posibles, ni aparecen.

A falta de industria, queda claro que, por más que la juventud cordobesa se forme con mil y un cursos, idiomas y másteres, las opciones disponibles son bastante limitadas. No es de extrañar, por tanto, que el número de jóvenes que residen en Córdoba siga decreciendo, un 1,88% en un año, según el Observatorio Argos, que señala que la población juvenil representa apenas el 16,89% de los habitantes de la provincia, y eso que Córdoba está entre las que tienen más jóvenes (la media andaluza está en un 15,98%).

Del total de jóvenes parados inscritos como tal en Córdoba, el 18,2% lleva más de un año buscando empleo, la gran mayoría en el sector servicios y un 31% no han trabajado nunca. Todo ello, en un año en el que la contratación de jóvenes ha mejorado, al incrementarse un 13,65% respecto al año anterior. Eso sí, solo un 2,5% de los contratos fueron indefinidos.

EMPLEO TEMPORAL // El empleo temporal está siendo la salida de muchos jóvenes, condenados a la inestabilidad laboral. Ana Sánchez, directora de Adecco, una de las empresa de trabajo temporal más fuertes con sede en Córdoba, cree que estos contratos pueden ser un buen trampolín. «Córdoba sigue a la cola de Andalucía, pero aún así el número de contratos para jóvenes se incrementó un 7% el año pasado, lo que indica que crecemos poco a poco», señala. Según su experiencia, muchas empresas aprovechan los trabajos temporales para probar a empleados y, si el perfil encaja, apuestan por el contrato indefinido. La ventaja del contrato temporal, al contrario de lo que se pueda pensar, es que la empresa «está obligada a pagar la parte proporcional por vacaciones, finiquito y demás, lo que eleva la remuneración mensual en muchos casos», explica Sánchez.

Actualmente, los perfiles más demandados en Adecco son «operarios de producción, carretilleros, técnicos de mantenimiento y personal para departamentos de calidad», señala su directora, que también aprecia un repunte en la hostelería, el comercio y el ámbito de la informática para temas de innovación digital. Por su experiencia con las empresas, afirma que más allá de la formación específica que requiera el puesto, todas valoran «la aptitud para trabajar en equipo, la polivalencia, el compromiso y la implicación».