El portavoz del grupo municipal de IU en el Ayuntamiento, Pedro García, rechazó ayer la solución planteada por el PSOE para tratar de buscar el consenso en torno a la eliminación de algunos nombres del callejero cordobés, que pasa por eliminar los nombres y apellidos y sustituirlos por otras «fórmulas» como plaza del barrio de Cañero y no de Antonio Cañero, o avenida de Vallellano en lugar de Conde de Vallellano. «Eso es como quitar la calle Adolf Hitler y dejarle Hitler solo», dijo ayer García, para quien «la ley de memoria no puede tener atajos ni permite regates». «Nosotros lo que queremos es que se cumpla la ley y poner el nombre de una persona que participó en el genocidio es hacer un regate a la misma con el que no estamos de acuerdo. Es una ley de memoria histórica y con ese atajo la gente seguiría relacionando la calle a un determinado personaje histórico», añadió.

El portavoz de IU en el Ayuntamiento de Córdoba anunció, además, que si finalmente esa es la solución que se lleva al pleno, su formación acudirá a la Junta de Andalucía «para que actúe de oficio y se cumpla la ley». «Si el consenso pasa por que quienes participaron en el genocidio de la dictadura sigan siendo homenajeados, no habrá consenso», concluyó.

La propuesta del PSOE, sin embargo, sí parece contar con el apoyo del principal grupo de la oposición, el PP. Su portavoz municipal, José María Bellido, se mostró proclive a esa salida en los casos en los que no hubo consenso en la comisión municipal de Memoria Histórica: Cruz Conde, Cañero, Conde Vallellano, José María Pemán y Cronista Rey Díaz.