El primer teniente de alcalde, Pedro García, mostró ayer su disposición a abrir el debate sobre la imposición de una tasa turística en Córdoba, aunque recordó que se trata de un asunto de rango andaluz y que es la Junta de Andalucía la que tendrá la última palabra en esta materia. García explicó que los cuatro responsables de Turismo de las ciudades del Eje Turístico (Sevilla, Málaga, Granada y Córdoba) mantuvieron una reunión la semana pasada en Tokio para abordar esta cuestión que, en cualquier caso, «no tiene marcha atrás». García añadió que «en función del debate que haya en otoño, se tomará una posición común» respecto a la posibilidad de imponer un impuesto a los viajeros que ya se aplica, por ejemplo, en Cataluña y Baleares.

El primer teniente de alcalde hizo estas declaraciones un día antes de la celebración del Día Mundial del Turismo, que se dedica hoy al turismo accesible. Ayer 180 niños de colegios de la periferia cordobesa visitaron junto a cuatro guías el casco histórico en una actividad que pretende hacerse extensible al resto de centros educativos. Los pequeños ofrecieron flores a los turistas que visitaron ayer Córdoba.

Pedro García también habló de las previsiones turísticas para el otoño, después de un verano de récord, y constató que hay una «gran expectación» en el sector por continuar en esta línea ascendente. En último lugar, hizo un repaso de las tareas pendientes en su área de aquí a final de año, empezando por solucionar el conflicto del Consorcio de Turismo y la creación del nuevo ente; la adjudicación del contrato del montaje del espectáculo nocturno del Alcázar --que se hará por vía de urgencia--, y culminar la puesta en valor del Centro de Recepción de Visitantes. Precisamemente, sobre este inmueble Pedro García explicó que hay que terminar de amueblarlo, abrir el bar y la tienda para que «a principios del año que viene esté al 100%», cuando se celebrarán unas jornadas de puertas abiertas para darlo a conocer.