El atropello de una joven de 25 años en un paso de peatones de la calle Escultor Fernández Márquez, que fue trasladada al hospital Reina Sofía, se ha saldado con la puesta a disposición ante el juez de un joven, que supuestamente conducía el coche y que dio positivo en el control de alcoholemia, aunque no superaba los 0,60 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.

Fuentes cercanas a la investigación detallan que en el coche viajaban cuatro jóvenes y en un primer momento el padre de uno de ellos dijo que había sido él quien conducía el vehículo, de manera que fue detenido el viernes, pero no quiso declarar y fue puesto en libertad con cargos.

No obstante, un testigo del atropello dijo que era un joven el que conducía y en la mañana de ayer el padre del joven declaró en sede policial que no era él quien conducía, sino el hijo, tras lo cual las diligencias han sido puestas a disposición del juez. Según las fuentes, todos los jóvenes dieron positivo en el control de alcoholemia.

La joven de 25 años fue trasladada al hospital Reina Sofía y presentaba politraumatismo, aunque se encuentra "estable, consciente y orientada", según han precisado fuentes sanitarias.