Unas 69 toneladas de tabaco de contrabando intervenidas; ocho naves de almacenaje y elaboración desmanteladas en Córdoba, Antequera, Málaga y Madrid, y 62 detenidos, 56 de ellos en Córdoba, todos en libertad con cargos. Ese es el balance de la operación Rama, que se acaba de dar por concluida con una tercera fase en la que han sido arrestadas 44 personas en Córdoba y se ha investigado a otras 52 dedicadas a la distribución de tabaco de contrabando en las provincias de Córdoba -donde la organización tenía su base-, Toledo, Sevilla, Jaén, Badajoz, Ciudad Real, Granada, Málaga, Madrid y Ávila. Los investigadores estiman que la banda desarticulada ha podido producir y comercializar unas 200 toneladas de tabaco de contrabando.

El operativo, llevado a cabo por la Policía Nacional y la Agencia Tributaria, ha constado de tres fases. La primera se inició en enero del año pasado, cuando se tuvo conocimiento de la existencia de una red de contrabando cuyos integrantes estarían asentados en Córdoba. Tras las pesquisas oportunas, se supo que se dedicaban a la introducción de grandes cantidades de hojas de tabaco procedentes de países como Polonia, Grecia, Bangladesh o India que almacenaban en dos naves en Las Quemadas y una en Amargacena. A continuación, esas hojas de tabaco eran manipuladas, preparadas y envasadas para ser comercializadas a través de internet por toda España.

PRIMER GOLPE // Ante la llegada a una de las naves investigadas de un tráiler presumiblemente cargado con hojas de tabaco, los agentes actuaron el 15 de junio. Aquel día hallaron en una nave una ingente cantidad de cajas con hojas de tabaco, interviniéndose en total 40 toneladas. Simultáneamente, los agentes registraron una segunda nave en la que se procesaba y envasa el producto, y en la que encontraron a varias personas picando hojas de tabaco. En esta nave se aprehendieron unos 2.000 kilos de tabaco picado. Y en un tercer registro se intervinieron otros mil kilos, en este caso ya manipulados y envasados. En total, 43 toneladas en un solo golpe a la banda.

En aquella ocasión fueron detenidos cinco hombres -entre ellos un padre y dos hijos-, todos cordobeses y con edades comprendidas entre 25 y 60 años. Dos de ellos eran los presuntos responsables de la red investigada y los otros integraban un segundo escalón en la organización.

La segunda fase de la operación tuvo lugar en octubre y se saldó con otras 26 toneladas de tabaco ilegal intervenido, 13 arrestados -siete de ellos en Córdoba, entre los que se encontraban los cabecillas- y cinco naves desmanteladas en Andalucía y Madrid. Esta segunda intervención se produjo después de que se detectara que el grupo se había reorganizado, aunque la «jerarquía de la organización mantenía su estructura», según informó la Policía. Eso sí, había «aprendido» y ahora establecía medidas para «dificultar» su detección. Por ejemplo, compraba las hojas de tabaco en países comunitarios y las almacenaba en más de una nave y alejadas de Córdoba, como en Málaga, Antequera y Écija. Además, la organización contaba con trabajadores para la manipulación y transformación del tabaco, así como encargados de los pedidos y reparto a menor escala, encontrándose ya el tabaco picado y embolsado.

Así, el 24 de octubre se desplegó un nuevo dispositivo policial ante la posible llegada a Antequera de un camión cargado de tabaco. Una vez interceptado, se encontraron en él unos 6.000 kilos de hojas de tabaco, a los que se sumaron otros 1.000 dentro de una nave. Paralelamente se actuó en otra nave en el polígono de Guadalhorce, en Málaga, donde manipulaban el producto, se arrestó a otras tres personas y se hallaron 700 kilos.

Además, tras conocer que la mercancía del camión de Antequera había sido trasbordada en Écija, se supo que allí había descargado 51 bultos otro tráiler procedente de Madrid y se siguió a un tercer vehículo que había salido hacia Huelva con el resto de los bultos. Finalmente, se detuvo en Sevilla con 4.350 kilos de tabaco. Igualmente, se localizó otra nave en Córdoba, donde había 1.770 kilos, balanzas y bolsas para empaquetar, y se arrestó a otra persona. Y en Madrid, de donde procedía uno de los camiones, se registraron naves en Villaverde y Coslada, donde hallaron 12.200 kilos de tabaco sin elaborar.

En la última fase, iniciada en noviembre y de la que informó ayer la Policía, se ha analizado toda la información obtenida, lo que ha permitido conocer que la red se extendía por numerosas provincias, identificándose a los responsables de la distribución a menor escala en Córdoba, Toledo, Sevilla, Jaén, Badajoz, Ciudad Real, Granada, Málaga, Madrid y Ávila, arrestándose a 44 personas.