La operación Pitufo, que llevó a cabo la Policía Nacional en abril del 2008 contra una supuesta red dedicada al expolio de yacimientos arqueológicos y que se saldó con más de una veintena de detenidos en varios puntos de España --con especial incidencia en Córdoba-- y la intervención de miles de piezas como monedas, vasijas o fósiles, ha terminado siete años después en los juzgados con un fallo absolutorio para cuatro de los cinco únicos acusados que finalmente fueron llevados a juicio por receptación y la declaración de prescripción del delito para el quinto de ellos. Además, en la sentencia se dispone la devolución de las piezas intervenidas a sus titulares.

La titular del juzgado de lo Penal 4 de Córdoba recuerda en los hechos probados que las actuaciones tuvieron su origen en la solicitud de la Brigada de Patrimonio Histórico de la Comisaría General de Policía Judicial de intervenir unos teléfonos en relación con la existencia de una red dedicada a la manipulación y venta ilícita de piezas arqueológicas procedentes de distintos yacimientos. Además, apunta que la investigación se inició por la interceptación de varios teléfonos entre aficionados al coleccionismo de piezas arqueológicas de diversa índole. Sin embargo, la magistrada asegura que no se ha podido determinar en la causa que los acusados formaran parte de una trama o red dedicada a la distribución y venta ilícita de piezas arqueológicas. Y añade que tampoco se ha podido probar que las que se les intervinieron en sus domicilios tuvieran procedencia ilícita o de expolios.

La sentencia señala que no se ha probado nada en autos sobre el origen de las piezas intervenidas ni sobre su valor; que los acusados participaran en expolios, ni se han concretado ventas en internet. En definitiva, "no ha quedado probado, más allá de las posibles sospechas y mero indicio, insuficientes para desvirtuar la presunción de inocencia, la participación de los acusados en los hechos enjuiciados", por lo que son absueltos.