Apocos días de que se complete el mes de abril, la recepción de la obra de La Normal al Ayuntamiento sigue pendiente, según fuentes de Urbanismo, porque se siguen «completando flecos», lo que estaría retrasando el traslado de las delegaciones que deben ocupar este espacio del distrito Sur para la puesta en marcha de actividades y servicios. De momento, y pese a que se dio el mes de abril como marco general para que el edificio estuviera a pleno rendimiento, nadie quiere avanzar fechas concretas.

Una de las delegaciones que estos días trabaja a marchas forzadas para cumplir los plazos establecidos es la de Cultura, que tiene previsto iniciar su actividad con la biblioteca. Según el concejal del ramo, David Luque, «empezaremos con servicios públicos básicos como la biblioteca y mediateca, que se trasladará desde su ubicación actual en el centro cívico Arrabal Sur a la Normal con la idea de situarla en un lugar más céntrico para los vecinos de todo el distrito mientras la sala actual se dedicará a sala de lectura y estudio», señaló. La persona encargada actualmente del servicio de biblioteca en dicho centro cívico también se trasladará a la Normal.

Lo que está planteando más dificultades a Cultura es la oferta de talleres, que, a falta de personal municipal, debe realizarse a través de colaboraciones con terceros. «Según los servicios jurídicos municipales, el principal escollo se debe al hecho de que el edificio es propiedad de la Universidad de Córdoba y al estar cedido al Ayuntamiento no puede ser cedido de nuevo a otros colectivos». También está en duda si quienes realicen los talleres podrán cobrar o no por sus actividades. El vicerrector de Infraestructuras de la UCO, Antonio Cubero, confirmó que la titularidad del inmueble es de la Universidad aunque el edificio fue cedido en el 2005 durante un periodo de 50 años. Pese a ello y a pesar de que el proyecto de la Normal nació como contenedor dinámico, basado en la participación para la generación de actividades, la cuestión no estaría resuelta a nivel administrativo.

Según David Luque, la Dirección General de Gestión está analizando el expediente y, de momento, parece que la única opción viable sería la firma de un acuerdo de colaboración «con un grupo de colectivos que se han unido y que podrán desarrollar su actividad en La Normal a cambio de ofrecer una serie de talleres». Cultura ocupará las plantas sexta y séptima.