Bajo el lema No corras, no bebas... No cambies de ruedas, la Dirección General de Tráfico, en colaboración con la Asociación de Personas con Lesión Medular y otras discapacidades (Aspaym), puso ayer en marcha una nueva campaña de concienciación y control para evitar el consumo de alcohol y drogas entre los conductores.

Esta campaña, que se prolongará hasta mañana, se inició ayer y consistirá en controles preventivos tanto de acohol como de drogas con la finalidad de ir reduciendo las cifras de siniestralidad asociadas a estas causas. Según explicó el subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, doce de cada cien conductores reconocen haber consumido estas sustancias alguna vez antes de conducir. Asimismo, indicó que en cuatro de cada diez fallecidos en los accidentes de tráfico se hallan restos de haber ingerido alcohol o consumido sustancias estupefacientes.

Por su parte, el jefe provincial de Tráfico, José Antonio Ríos Rosas, indicó que «el triángulo alcohol, drogas y celebraciones está terriblemente asociado, por eso se pone en marcha esta campaña, para concienciar sobre la peligrosidad de esta asociación». Por ello, dijo que se va a extremar la vigilancia en las proximidades de los lugares donde «haya fiestas y celebraciones y en los itinerarios más transitados por los ciclistas». Ríos Rosas recordó que el consumo de estas sustancias aumenta también el peligro de tener un accidente al tiempo que además «tiene incidencia en el pronóstico de las lesiones. Es decir, tenemos lesiones mayores si hemos ingerido alcohol y drogas y el pronósitco suele ser más grave».

Ayer, ambas autoridades se hicieron acompañar en un control que se estableció en la avenida de Cádiz por dos miembros de Aspaym, quienes con sus sillas de ruedas se acercaban hasta los conductores, para aportarles información sobre su asociación y las consecuencias que puede tener conducir de manera irresponsable. Así, Francisco Pedrosa explicó que «pueden ocurrir accidentes muy graves por la forma de conducir. A veces se consume alcohol o drogas que nos llenan de euforia y siempre pensamos que controlamos, cuando no es así».

Por su parte, Miguel Ángel Escudero, vicepresidente de Aspaym, señaló el valor que tienen este tipo de iniciativas para concienciar a los conductores y dijo que su presencia y la de su compañero en el control de ayer suponía «un retrato vivo de las consencuencia que tiene la conducción sin tomar las medidas necesarias». Indicó que «esta campaña se hace todos los años, pero hay que seguir haciéndola siempre porque con una sola vida o un accidente que podamos evitar ya habrá merecido la pena».

En los controles que se establecen solo un 1% de los conductores suelen dar resultados positivos, pero los daños que se generan suelen ser irreversibles.