El Consejo del Movimiento Ciudadano (CMC) reclama medidas contra las inundaciones. El máximo órgano de participación ciudadana respalda la moción aprobada por unanimidad en el último Pleno del Ayuntamiento, que implica la creación de un grupo de trabajo que retome la actividad iniciada en el 2014 por la plataforma de Afectados por las Inundaciones del Guadalquivir (Apaig), que ya creó una mesa del río que quedó parada tras las municipales del 2015. El CMC considera urgente dar una solución a las parcelaciones con riesgo de anegación y quiere evitar lo sucedido con las fuertes lluvias de febrero y diciembre del 2010.

El CMC participará en la mesa con cuatro representantes (por Alcolea, Villarrubia, El Higuerón y Trassierra) y cree que su constitución debe ser un paso más en el intento de lograr servicios. «No nos íbamos a contentar con la salida lograda para las parcelaciones regularizables con la modificación de la LOUA, sino que hay que trabajar para conseguir la dotación de servicios básicos y dar una solución a la peligrosidad» que tienen las urbanizaciones con riesgo de inundación y «que este año se ha vuelto a poner en evidencia», ya que «la subida del río ha sido tan llamativa que ha vuelto a suscitar preocupación», señala el presidente del CMC, Juan Andrés de Gracia.

El CMC es consciente de que todos los casos no son iguales. «Si se ve que hay casas que invadieron el cauce, deben desaparecer» del mismo, pero hay otras que están fuera aunque «cerca del río» y se encuentran en riesgo «cuando sube por exceso de lluvia, falta de limpieza o elevación del fondo por las arenas existentes o los troncos que lleva», y, si no fuera por eso, «tendrían posibilidad de entrar en el proceso de regularización o de dotación de servicios», añade. De Gracia asegura que la existencia de «un río vivo» debe ser «compatible» con las casas de su entorno «y hay que buscar la manera». «Lo que no puede ocurrir», asevera, es que «20 años después estemos hablando del río y no de soluciones definitivas» y recuerda que no han culminado los trabajos de encauzamiento iniciados hace 20 años.

El CMC quiere que el Ayuntamiento lidere las reivindicaciones ante las administraciones y convoque la mesa del río heredera de la impulsada por Apaig, que formará parte de la misma. «El trabajo debe ser común», indica, e incluir el mantenimiento de los arroyos. Por último, cree fundamental que se solucionen los conflictos de competencias.