La modificación de PGOU para lograr que las industrias que deseen valorizar residuos para su uso como combustible alternativo, y que repercute en Cosmos, provocó ayer el desencuentro entre los socios de gobierno local, PSOE e IU, y suscitó críticas entre la oposición ya que la tramitación va a necesitar más tiempo. El consejo rector de Urbanismo tenía previsto aprobar un estudio sobre salud, pero no pudo. El concejal socialista Emilio Aumente pidió la retirada de ese punto, que respaldaron PP y Ciudadanos, quedándose solos IU y Ganemos, que deseaban dar el visto bueno al documento y proseguir con la tramitación. Este desencuentro entre IU y PSOE sobre Cosmos no es el primero desde que la modificación de PGOU echó a andar en el 2015, aunque sí es la primera vez que las diferencias quedan plasmadas en una votación, aunque sea para retirar un punto.

Tras el consejo, el presidente de Urbanismo, Pedro García, visiblemente contrariado, explicó que Aumente ha solicitado la retirada «porque hay cosas que no tiene claro». Fuentes de IU aseguran que lo que ocurrió abre una «grave crisis» entre PSOE e IU, «que se va a intentar solucionar, pero que no es fácil» y que, de no resolverse, haría difícil mantener el pacto entre ambos.

El concejal Emilio Aumente restó importancia a lo sucedido asegurando que «forma parte de las discrepancias que podemos tener». Es más, recuerda que «no es la primera vez» que hace una advertencia sobre la innovación, que hasta ahora no se ha atendido. En relación al informe sobre salud que Urbanismo debía haber aprobado ayer, indica que muestra un mapa genérico de la Campiña (que empieza al lado del polígono de Amargacena) pero no delimita las zonas concretas en las que se pueden instalar las industrias que quieran valorizar, por lo que exige «que se clarifique» el ámbito y se «tipifiquen los residuos». Por ello, solicita que se haga un nuevo documento o se modifique este y se lleve de nuevo a aprobación. Aumente piensa que la innovación «no es pormenorizada, no afecta a una sola zona, sino a todos los polígonos», por lo que cree que hay que hacer un estudio más exhaustivo y ver su afección en otras industrias y no solo en Cosmos.

El portavoz de Ganemos, Rafael Blázquez, se mostró indignado y preocupado, ya que piensa que ese paso pone en peligro toda la tramitación de la innovación «porque hay unos plazos que van corriendo». En este sentido, se refiere al periodo de un año dado para la suspensión de licencias, que empezó a contar con la aprobación inicial por el Pleno en diciembre del 2016. Blázquez recordó que «desde hace tiempo advertimos que debíamos ser cuidadosos y que no se quedase ningún documento por presentar». Por ello, opina que la gestión del expediente ha sido «manifiestamente mejorable, pero eso no justifica que el PSOE vote para su retirada».

El concejal del PP Salvador Fuentes califica de «auténtica chapuza» el informe de salud de Urbanismo, que «esconde el atajo premeditado de IU para sacar adelante la modificación de forma forzada». Fuentes avisa de que IU tiene prisa por aprobar la innovación por la conclusión del plazo para la suspensión de las licencias y critica la «deslealtad» de Urbanismo por «ocultar información», ya que «sabe desde marzo» que debía hacer el informe. Fuentes teme que cualquier empresa puede pedir la nulidad del procedimiento acogiéndose a que el informe debía haberse hecho con la aprobación inicial.

El portavoz del Ciudadanos, David Dorado, se mostró satisfecho por la retirada y criticó la «falta de rigor y de datos oficiales» del informe. A su juicio, que «el PSOE haya reconocido que la tramitación de la innovación del PGOU no se está haciendo de manera sensata marca un antes y un después». H