El jerezano Javier Ortiz, de 31 años, ha sido uno de los beneficiarios de estos cuatro trasplantes hepáticos llevados a cabo por profesionales del hospital Reina Sofía en apenas 72 horas. En el 2011 a Javier le diagnosticaron síndrome de Overlap (hepatitis autoinmune con colangitis esclerosante primaria), lo que había condicionado mucho su salud. El 20 de julio este joven entró en lista de espera para trasplante y el 27 de agosto llegó la ansiada donación y recibió un injerto hepático en el Reina Sofía. «Los especialistas que me tratan me dicen que la progresión del trasplante es positiva. Me siento muy afortunado de haber recibido esta donación y agradecido al donante, ya que antes del trasplante vivía con angustia de no saber cómo me iba a levantar al día siguiente o si podría hacerlo», apuntó. «Quiero hacer una llamada de atención a la sociedad para que se solidarice con la donación de órganos, porque mi donante me ha regalado una segunda oportunidad de vida. Ahora solo pienso en recibir el alta, retomar mis estudios de multimedia y ojalá volver a hacer deporte, que me encanta», añadió.