La marcha del concejal de IU Rafael del Castillo ha abierto un debate partidista sobre las causas que han motivado su dimisión. La ambigüedad del comunicado de prensa en el que explicaba que se iba por motivos «políticos y personales» ha servido de mecha para las interpretaciones. En él, el edil atribuye su dimisión «al hecho de tener toda una legislación en contra, marcadamente de derechas, unida a una correlación de fuerzas que no es la más favorable para llevar a cabo las políticas de izquierdas que nos gustarían».

Esa «correlación de fuerzas» ha sido interpretada por algunos como una crítica velada a sus socios de gobierno, el PSOE, y eso parecía subyacer a la respuesta escueta del propio Rafael del Castillo preguntado ayer sobre si los problemas los había tenido con el PSOE: «Desde luego con IU no», respondió, después de remitir en varias ocasiones al comunicado de prensa y rehusar dar más explicaciones sobre su marcha.

La concejala de IU Amparo Pernichi, visiblemente afectada por la dimisión de su compañero, para el que tuvo palabras de cariño y agradecimiento, defendió el trabajo realizado por su grupo municipal: «Somos 7 (concejales socialistas) y 4 (de IU), pero eso no nos resta fuerza para poner los proyectos encima de la mesa y conseguir llevarlos a cabo. En esa correlación, IU está sacando adelante muchísimas cosas».

La alcaldesa tampoco ha querido interpretar como crítica al PSOE las palabras del concejal de Servicios Sociales y considera que es a la oposición, al PP, a quien se refiere. «Creo que no ha tenido la sensibilidad suficiente en fuerzas políticas de derechas, que forman parte del pleno, y en decisiones de ciudad no nos hemos encontrado con el apoyo de todos», dijo la regidora, que también tuvo palabras de agradecimiento para el concejal, si bien garantizó que el trabajo en esta área se seguirá haciendo. «Seguiremos haciéndolo incluso con mucho más empeño, porque hay una bandera que compartimos las fuerzas de izquierdas de este gobierno: atender a quien más lo necesita en esta ciudad». Rafael Blázquez (Ganemos) sí fue explícito al culpar al PSOE de estar «frenando» los avances sociales y atribuyó en buena parte la marcha de Del Castillo a esta circunstancia. «La Oficina de la Vivienda se ha convertido en una trituradora de personas», dijo.

En un plano más institucional, la alcaldesa informó de que las concejalas de IU Amparo Pernichi y Alba Doblas se harán cargo «puntualmente» de las delegaciones de Servicios Sociales y Cooperación y Solidaridad, respectivamente. Se trata de una medida temporal que dará continuidad al trabajo en sendas áreas municipales, hasta que se produzca el cese oficial del edil en el Pleno del 12 de septiembre, donde renunciará a su acta.

También está pendiente el relevo. IU celebró ayer un consejo local para analizar la marcha de su concejal, que no acudió a esta reunión. La organización quiere resolver cuanto antes esta cuestión. A Del Castillo le sucedía en la plancha electoral Francisco Bellido, del movimiento vecinal.