La tendencia a la baja de las disoluciones matrimoniales registrada en los últimos años se ha roto en el pasado ejercicio. Los juzgados cordobeses tramitaron 2.001 divorcios en el 2012, la cifra más alta de los últimos cinco años y un 10,5% más que en el 2011. Además, según la estadística publicada por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el conjunto de las disoluciones (suma de los divorcios, las separaciones y las nulidades matrimoniales) fue de 2.146, un 7,8% superior al año anterior. Así las cosas, mientras que en los últimos años se argumentaba que la caída de rupturas se debía a que muchas parejas resistían juntas para no afrontar los altos costes que suponía su disolución --abogados, dos viviendas y gastos que se duplican--, a la vista de los datos del 2012 se puede concluir que la crisis económica ya no es motivo para aplazar las rupturas de pareja.

De los 2.001 divorcios presentados en los juzgados cordobeses el año pasado, que suponen una media de 5,5 al día, 1.159 (el 57,9%) fueron no consensuados y 842 de mutuo acuerdo, registrándose un aumento de los contenciosos y una disminución de los consensuados respecto al 2011. Aquel año se registraron 1.810 divorcios, 928 de ellos consensuados y 882 contenciosos, según la estadística del CGPJ que recoge el conjunto de las disoluciones matrimoniales presentadas en los juzgados de Primera Instancia, de Primera Instancia e Instrucción y de Violencia sobre la Mujer.

DOS MILLARES // La cifra de divorcios registrada en el 2012 es, además, la más alta de los últimos cinco años. No solo ha superado en un 10,5% la cifra del año anterior, pasando de 1.810 a 2.001, sino que en el último lustro nunca se habían superado los dos millares. En el 2008 se anotaron 1.885 y en el 2009 se tramitaron 1.826, y ni tan siquiera el repunte que hubo en el 2010, con 1.976 divorcios, alcanzó la cifra actual.

En cuanto al conjunto de disoluciones matrimoniales, las 2.146 del año pasado suponen un 7,8% más que en el 2011, cuando se registraron 1.990. El total que se recibió en los órganos judiciales en el 2012 se distribuyó en 2.001 divorcios, 71 separaciones no consensuadas, otras 68 de mutuo acuerdo y seis nulidades matrimoniales. Esta notable diferencia entre divorcios (un 93,2% del total de disoluciones) y separaciones se explica, sin duda y como ya es común los últimos años, por el cambio legislativo del 2005, la ley del divorcio exprés, que permite el divorcio sin necesidad de separación previa. Así, el descenso de las separaciones es sostenido desde hace cinco años.

La estadística del CGPJ también señala al cuarto trimestre del 2012 como el que más divorcios y más disoluciones en conjunto ha registrado de los últimos cinco años. De octubre a diciembre del 2012 los juzgados ingresaron 642 disoluciones, 600 de ellas divorcios y 42 separaciones (22 contenciosas y 20 consensuadas). En el primer trimestre del 2012 se anotaron 481 divorcios, 506 en el segundo y 414 en el tercero. En cuanto a las separaciones, se registraron 37 de enero a marzo, 45 de abril a junio y 15 de julio a septiembre. En cuanto al crecimiento interanual, el cuarto trimestre del 2012 registró con 600 divorcios un 19,2% más que en el mismo periodo del año anterior (503) y las 642 disoluciones en conjunto registradas en los tres últimos meses del año supusieron un 16,9% más que las 549 anotadas entre octubre y diciembre del 2011.