Los 21 centros de protección de menores que hay en la provincia de Córdoba ofrecen 226 plazas para niños y adolescentes que, por diversas circunstancias, están bajo la tutela de la Junta de Andalucía. En estos centros viven en la actualidad 170 menores, por lo que el nivel de ocupación es del 75,22%, lejos de la saturación que sufren los equipamientos de otras provincias.
De los 170 niños y jóvenes acogidos en los centros públicos y concertados solo 48 son inmigrantes, que se reparten entre algunos que son exclusivamente para menores de otros países y otros de carácter regional. En el resto de centros, hasta el momento, prevalece el criterio de arraigo y en general acogen a niños con necesidades especiales de la provincia cordobesa.
Fuentes de la Delegación para la Igualdad y Bienestar Social señalan que "siempre se intenta que los menores se queden en su provincia, más cerca de sus familiares o tutores, pero el objetivo de la Junta de Andalucía es que antes de que finalice este año todos los centros acojan menores tanto de Córdoba como de otras provincias e inmigrantes".
SATURACION Aunque no se especifica desde Igualdad, la razón de este cambio de criterio está posiblemente en la saturación que sufren los centros de protección de menores de otras provincias, en parte causada por la afluencia de inmigrantes que llegan en pateras y cayucos a las playas andaluzas, algunos de los cuales son menores solos.
Los centros de protección de menores no son homogéneos, sino que hay tres modalidades de actuación: acogida inmediata, residencial básico y de programas específicos. Once de los centros son de residencial básico, es decir, son una especie de residencia para niños con dificultades especiales y situaciones de vulnerabilidad social. De todos ellos, uno acoge únicamente a jóvenes de entre 16 y 18 años.
Hay cinco de los equipamientos que están especializados en la acogida inmediata de los niños y adolescentes en situaciones de riesgo, de los que uno está destinado solo a menores inmigrantes y cuatro son también de residencial básico. Además, en la provincia cordobesa hay tres centros para menores en conflicto social y dos para niños con necesidades educativas especiales.
Todos los anteriores, salvo el destinado a primera acogida de menores inmigrantes, son para los niños de la provincia de Córdoba. Pero hay otros cuatro centros que tienen carácter regional y realizan programas específicos. Dos de ellos están especializados en trastornos de conducta y otros dos son para niños con problemas de adicción.
Unicamente uno de los centros, que es de necesidades educativas especiales, tiene un nivel de ocupación superior a su capacidad, con nueve niños en ocho plazas. En el resto de los casos la ocupación va del 37,50% de un centro de menores en conflicto social al 100% del destinado a acogida inmediata de inmigrantes.
