-Magtel, que empezó en los años 80 con instalaciones de la red de telefonía, ha ido diversificando mucho su actividad.

--Empezamos como subcontrata de Abengoa, todo vinculado con Telefónica, que era lo que había, pero ya se empezaba a trabajar algo en fibra óptica y poco a poco fuimos ampliando los clientes, porque las telecomunicaciones se fueron diversificando. En los años 96-97 Renfe plantea hacer el mayor anillo de fibra óptica que hay en todo el país y participamos nosotros, más de 5.000 kilómetros de fibra óptica. Poco a poco fueron entrando nuevas actividades como los sistemas y el mantenimiento de redes o las automatizaciones.

-Ustedes hicieron una apuesta importante en renovables. Una actividad en la que parecía que había muchísimo interés desde las administraciones, con incentivos para la construcción de plantas y ayudas para las instalaciones domésticas, pero después se paralizó todo.

--Efectivamente. Nosotros, ya en el 2005, vimos que había un gran futuro en las renovables. Y el Gobierno de turno apostó con órdenes y decretos para que se incentivaran. Yo creo que se les fue un poco de las manos. Se hicieron bastantes centrales, porque preveían 500 megavatios y se llegaron a hacer casi 3.000. Pero en septiembre del 2008 dijeron que lo que estuviera en funcionamiento seguiría para adelante, pero lo demás, no. En enero del 2012, el Gobierno bloquea totalmente las renovables y se quedan sin incentivos.

-Se refiere al Gobierno central...

--Sí, sí, al central. Entonces, mucha gente que estábamos trabajando en ese campo y que habíamos invertido mucho dinero nos quedamos bloqueados. Pero al llegar al 2015 vimos cómo se iban abaratando los materiales y pensamos que ya las renovables podrían ser rentables sin ninguna prima. Y empezamos a reactivar proyectos y a trabajar en esa línea. Hoy nos encontramos con que tenemos una gran cartera de proyectos. Por otro lado, parece que el Gobierno empieza a volver a valorar que las renovables son útiles de cara al futuro del mercado de la energía.

-Claro, es que todo el mundo pone el mismo ejemplo al hablar de esto, que no es de recibo que Alemania produzca más energía solar que España. Y quizás también influyan las propias presiones de la Unión Europea ¿no?

-En el 2008, Alemania tenía 8.000 megavatios instalados de fotovoltaica. España, después del boom del 2008, tenemos 3.000. Aquí además está penalizada, con el denominado «impuesto al sol», del 7%. Me imagino que la Unión Europea va a obligar a que todos estos impuestos desaparezcan y promover que todos podamos acceder al autoconsumo. De todas formas, parece que las renovables vuelven a ser interesantes, pero en grandes plantas. El tema del autoconsumo todavía no está bien definido, aunque ya hay grandes marcas de coches anunciando que en muy pocos años solo harán híbridos o eléctricos. Así que tenemos que ir pensando en que cada casa necesitará una fuente de generación de energía para todo esto.

-Pero lo que más preocupa ahora es el precio de la energía…

--Tenemos que conseguir abaratar la energía. Se están pagando unos precios que no eran imaginables hace unos años. Y también hay un cierto monopolio con el tema de la energía.

-Según los datos que maneja la Junta, Córdoba es una gran generadora de renovable, tanto por biomasa como por termosolar. Solo en esta modalidad, en la provincia hay una capacidad instalada de 299,8 megavatios.

--Sí, unos 300 megavatios en termosolar.

-¿Trabajan ustedes también otras energías?

--Sí. Tenemos una planta de 10 megavatios que está bastante avanzada, con toda la documentación, en Torredonjimeno. Lo que pasa es que las plantas de biomasa, en cuanto al aspecto económico, necesitan algo de subvención. Si no, cuesta trabajo. Y luego está toda el aprovechamiento del olivo, que por eso la queremos ubicar en esa zona, para aprovechar todos los residuos que nos lleguen del olivar y que el transporte no nos encareciera mucho el proceso… Pero la biomasa está muy en precario todavía y tiene un gran problema como es el propio combustible. No está regulado. Estamos desde las organizaciones empresariales intentando que todo el proceso de biomasa se pueda regular, que venga una buena materia prima, que se pueda quemar para poder llevarla hasta los hogares y pueda competir con los combustibles fósiles.

-En Andalucía hay también una fuerte implantación de eólica.

--Sí, aunque la eólica más cercana que tenemos está en la costa. En Córdoba, con todas las mediciones que se han hecho, no hay viento suficiente. La eólica está sobre todo en las zonas costeras. Nosotros entendemos que de eólica estamos perdiendo un poco el peso, me refiero a Andalucía. Ahora nos han superado otras comunidades autónomas. Aquí hemos sido prudentes, porque cualquier licencia que se presente en Aragón se resuelve en la mitad de tiempo que en Andalucía. Ahora mismo, a nivel de renovables, en febrero del 2018 se publicará el mapa de dónde se adjudican los proyectos de fotovoltaicas para la subasta de los 3.000 megavatios, los empresarios deben decir dónde van a ubicar sus proyectos. Ese mapa nos dirá qué comunidad es la que está apostando por las renovables.

-Pero usted ya sabe que no es Andalucía la que más apuesta.

--Andalucía yo creo que va a ser la última de la lista. Teníamos que ser los primeros y nos va a adelantar Castilla La Mancha, Extremadura….

-Cuando al principio de esta actividad Andalucía era líder ¿no?

--Somos los mejores, en cuanto a combustible, como es el sol.

-Pero me refiero a la capacidad de producción y al número de instalaciones.

--Fue Andalucía. Pero es que si en un proyecto medioambiental se te va un año y medio mientras que te sientas con otras administraciones y te aseguran que en ocho o diez meses tienes tu proyecto...

-Actualmente Magtel ¿en qué tipos de energías renovables está trabajando?

--Magtel tiene pendiente la planta de Torredonjimeno que ya hemos nombrado; tenemos en trámite entre Andalucía, Extremadura y Castilla-La Mancha, en proyecto más de 1.000 megavatios, para culminarlos de aquí a cinco años. Y de eólica, tenemos también proyectos en Granada, Cádiz, Sevilla y Extremadura.

-¿Cuánta potencia están generando las plantas que ya están en funcionamiento?

--Bueno, la planta termosolar de la Africana, con 50 megavatios. Pero esta termosolar tiene una característica que no la tienen otras y es que su producción ronda los 150 gigavatios al año. Porque tiene unos bancos de sales que cuando hay bastante radiación cogen temperatura y cuando baja el sol se recupera la energía acumulada.

-Las perspectivas del sector y de Magtel para los próximos años ¿son halagüeñas?

--Creemos que en cinco años habrá un buen camino y mucho desarrollo en renovables. A nivel de otras actividades de la empresa, pues se va abriendo poco a poco.

-¿Se puede decir que este sector se está sacudiendo la crisis?

--Cuando esto se vino abajo, no es que fuera una crisis, es que tocamos fondo y había que volver a empezar. Primero había que sacudirse el polvo de todo eso y luego andar. Y nosotros llevamos andando unos años ya, pero el futuro está por hacer. Pero sí, hay más dinamismo.

-¿Se puede cuantificar la inversión que va a suponer todos esos proyectos nuevos?

--La inversión para estos próximos cinco años supera los 1.000 millones de euros.