El Centro de Recepción de Visitantes que construye la Junta de Andalucía en las inmediaciones de la Mezquita-Catedral de Córdoba y se incluye en el programa de recuperación del entorno del Puente Romano ya ha superado el 50 por ciento de ejecución.

En declaraciones a Efe, el delegado de Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía en Córdoba, Francisco García, ha destacado que este tramo de las obras que se ha realizado es la parte "más laboriosa", puesto que ha consistido en un trabajo de arqueología "importante" en el que se han estudiado los restos hallados en el subsuelo.

García ha recordado que la construcción del Centro de Recepción de Visitantes supone levantar un edificio de nueva planta en una zona muy delicada desde el punto de vista arqueológico, ya que además de restos musulmanes han aparecido otros romanos y visigodos.

En concreto, el delegado ha detallado que han aparecido restos de una muralla de la Edad Media y una alberca visigoda y elementos romanos que se van a "musealizar" para que puedan ser visitados por el público.

Así, este proyecto expositivo ha supuesto una modificación de la cimentación inicial del edificio, ya que se ubicarán en el subsuelo de la construcción.

Dos edificios

Francisco García ha indicado que el Centro de Recepción de Visitantes estará compuesto por dos edificios que tendrán diferente altura, de manera que el más cercano al río será más bajo que el posterior.

El edificio posterior, que será el más cercano a la Mezquita-Catedral, albergará los servicios de información turística integral de la ciudad, una cafetería, una tienda de elementos expositivos y una sala de muestras, todo ello sobre rasante, mientras que en los sótanos se instalarán dependencias locales y se exhibirán los restos arqueológicos hallados.

En cuanto al edificio más cercano la ribera, el más bajo de los dos, García ha indicado que acogerá una terraza-mirador y las dependencias del Consorcio de Turismo y será utilizado para actos culturales y visitas.

Ambas edificaciones utilizarán en sus fachadas materiales similares a los usados en los edificios colindantes y está previsto que terminen de construirse en el segundo semestre del 2009, tras contar con una inversión de 4,8 millones de euros.