La carta de José Manuel Roldán Nogueras, en la que el rector pide la colaboración de la comunidad universitaria ante "este tiempo difícil", incluye el anuncio de un "necesario ajuste de la plantilla" cuyas posibles consecuencias negativas "no cabe ignorar", y el compromiso de que las medidas de austeridad, que pasan por "disminuir el número de cargos" tendrán presente "aspectos como la investigación, la protección de los investigadores en formación o el mantenimiento de la política de promociones hasta donde sea posible". En todo caso, asegura el rector, "todas las iniciativas serán debatidas y consensuadas con los representantes de todos los colectivos". Finalmente, el rector aclara que "no se han producido incrementos retributivos de cargos académicos en la UCO" añadiendo que "ni legalmente es posible, ni moralmente hubiésemos incurrido en semejante medida".