La delegada del Gobierno andaluz en Córdoba, Rafaela Crespín, informó ayer de que la Junta de Andalucía trabaja ya en la nueva cesión del Centro de Recepción de Visitantes al Ayuntamiento de Córdoba y recordó que fue un compromiso adquirido por la propia presidenta andaluza, Susana Díaz, a la alcaldesa de la ciudad, Isabel Ambrosio. Esta sería la segunda vez que esta Administración pasa la gestión de este inmueble a manos municipales. En la anterior ocasión, el PP, entonces en el gobierno, terminó devolviendo el edificio tras meses de polémica por el modelo de gestión del mismo. Crespín aplaudió la intención del actual equipo de gobierno de aglutinar en el Centro de Visitantes la política turística de la ciudad y calificó de buena noticia "todo lo que sea rentabilizar al máximo la inversión realizada por la Junta" en ese edificio. Por último, la delegada animó a desarrollar "un trabajo serio y riguroso" por el turismo de la capital.

Crespín también informó ayer de que la empresa encargada de las obras de reforma del Palacio de Congresos de Torrijos no ha llevado a cabo "ninguna acción" legal, tras el anuncio de la Junta de Andalucía de rescindir su contrato por incumplimiento del acuerdo. La delegada confirmó que el Gobierno andaluz redactará un informe del estado actual de la reforma para poder iniciar un nuevo proceso de contratación y liquidar el anterior.

En otro orden de cosas, la delegada del Gobierno andaluz también se refirió a la sanción impuesta al comedor del Rey Heredia por carecer de licencia y subrayó la disposición "a colaborar" con ellos. Crespín reconoció "la buena labor social" que se lleva a cabo, pero insistió en que el deber de la Delegación de Salud es velar por "la seguridad alimentaria" con "las máximas garantías".