Los sindicatos que forman parte de la junta de personal del hospital Reina Sofía (Satse, USAE, CCOO y CSIF, excepto UGT, que se abstuvo) rechazaron ayer «la privatización de los aparcamientos del hospital Reina Sofía» y anuncian que llevarán a cabo «cuantas iniciativas sean necesarias para mostrar esta oposición», para lo que ya han solicitado una reunión urgente a la delegada de Salud de la Junta, María Ángeles Luna. Por su parte, el parlamentario andaluz de Podemos, David Moscoso, criticó también la intención del Reina Sofía de «cobrar a los usuarios por usar el aparcamiento», lo que calificó de «abuso por suponer un copago a los enfermos y sus familiares». A estas críticas la dirección del Reina Sofía replicó que «no se trata de ninguna privatización de los servicios sanitarios, que seguirán siendo gratuitos y universales» y añadió el hospital que «lo único que se persigue con esta decisión es gestionar bien los aparcamientos y para ello es necesario establecer una tarifa para quienes los utilizan, siendo un modelo similar al de otros hospitales públicos»
La semana pasada la dirección del Reina Sofía sacaba a licitación la concesión de dominio público de la gestión y explotación de los nuevos aparcamientos del Reina Sofía por un plazo de 20 años, una fórmula que obliga a la empresa adjudicataria a asumir la mejora de accesos y párking del hospital y a su vez, como contraprestación, construir un nuevo edificio de consultas materno-infantiles.
EL PROYECTO / La concesión implicará que aparcar en el hospital costará más del euro diario que se paga ahora, ya que se aplicará una tarifa por minutos, medida que no afecta al personal del Reina Sofía, que seguirá estacionando gratis. La junta de personal del hospital ve «inaceptable que la dirección gerencia privatice los aparcamientos para recaudar a costa de los pacientes y familiares que necesitan atención». Los sindicatos afirman que «si bien los accesos y aparcamientos necesitan mejoras, su coste no puede recaer en los pacientes y usuarios que hagan uso del hospital, ya que lo hacen por necesidad».
La junta de personal expuso que «la gerente explicó que los aparcamientos serán de pago una vez se conceda la explotación a la adjudicataria del servicio» y lamentó que una empresa «haga negocio a costa de los enfermos y de sus familiares, ya que el coste medio por aparcar va a ser de 1,5 euros la hora». Satse, USAE, CCOO y CSIF consideran que se trata de «una maniobra privatizadora, con la excusa de reformar la accesibilidad y de construir un nuevo edificio de consultas materno-infantiles, suponiendo esta privatización un claro atentado al concepto de universalidad de la sanidad pública, ya que los pacientes deberán pagar por aparcar en el Reina Sofía, viendo mermado, en plena crisis, su poder adquisitivo por hacer uso de instalaciones sanitarias públicas».
