El portavoz de IU en el Ayuntamiento de Córdoba, Francisco Tejada, ha informado este jueves de que IU estudiará una serie de propuestas que plantea 'Córdoba Laica' con el objetivo de implantar una política municipal no confesional que suprima símbolos religiosos de actos públicos oficiales y replantee la celebración de actos, como por ejemplo la Semana Santa, donde no haya representación municipal.

Así lo defiende el representante de 'Córdoba Laica', José Antonio Naz, apoyado por el portavoz de IU, quienes han ofrecido una rueda de prensa tras una reunión a la que ha asistido el candidato de IU a la Alcaldía de Córdoba y coordinador provincial de IU, Pedro García; al tiempo que Tejada ha comentado que "hay un número importante de propuestas con coincidencia total".

Y es que, a su juicio, son "planteamientos absolutamente lógicos más allá de la creencia personal de cada uno" y ha puesto como ejemplo el caso de que se produzca la elección en un futuro de un "alcalde que practique la confesión islamista o evangélica", de modo que se pregunta "¿qué se haría?", de ahí que defienda las medidas de 'Córdoba Laica'.

En este sentido, el concejal de IU, tras acusar al gobierno local actual de no defender los intereses generales y "convertirse en representantes de la Iglesia", ha resaltado que las medidas tienen "perfecta validez en este momento para cumplir la Constitución Española", al tiempo que alude a "todo lo que se ha conocido en cuanto a las inmatriculaciones de la Iglesia con bienes públicos".

Mientras, Naz ha apuntado que "costará tiempo cambiar el calendario festivo", de manera que "se celebren conmemoraciones civiles más que otras ligadas al calendario religioso" y apuesta por vincular la Semana Santa más "como actividad turística y cultural", en la que plantean que no haya representación municipal, algo que defiende Tejada, que también dice estar "abierto al debate" en cuanto al cambio de nombre de la Feria de Nuestra Señora de la Salud.

En concreto, el colectivo presenta a los grupos municipales un total de 14 propuestas ante los próximos procesos electorales de mayo de 2015, de cara a "la construcción de un Estado laico", con "el objetivo de establecer la separación entre los poderes públicos locales y las religiones", de forma que "se establece la legitimidad estrictamente secular de las instituciones políticas, sin que quepa ninguna confusión entre fines religiosos y civiles".

Así, proponen "establecer la neutralidad o no confesionalidad del estado municipal en dos sentidos", como son "el compromiso de los poderes públicos locales para no inmiscuirse en los asuntos estrictamente religiosos, permitiendo la máxima libertad en ese sentido, sólo limitada por el respeto al orden público y las leyes", así como "la igualdad que impida cualquier tipo de discriminación por razón de ideología o religión o ausencia de ellas".

LAS MEDIDAS

De este modo, plantean "suprimir todo tipo de simbología religiosa en los actos oficiales y en los espacios de titularidad pública y no promover ritos ni celebraciones religiosas de ningún tipo"; "los actos públicos oficiales serán exclusivamente civiles y sin connotaciones religiosas", de manera que "ninguna autoridad pública o funcionario participará, en calidad de tal, en actos de naturaleza religiosa", al tiempo que "no serán invitados a actos civiles los representantes eclesiásticos de cualquier confesión".

Igualmente, piden que "se supriman, y con carácter retroactivo, todos los honores o votos públicos a advocaciones, santos, imágenes o simbología representativa religiosa, como condecoraciones o nombramientos de alcaldes perpetuos"; "todos los edificios e instalaciones dependientes de la administración local, así como sus organismos autónomos y demás entes estarán exentos de cualquier tipo de simbología religiosa, para cumplir con los principios de separación y neutralidad de la administración pública".

Asimismo, reclaman que no se done, ni facilite suelo público ni locales, ni se conceda financiación pública o exenciones fiscales municipales para la instalación de infraestructuras o realización de actividades a "ninguna confesión o institución religiosa", al tiempo que "las confesiones religiosas estarán obligadas a pagar los impuestos municipales, incluido el IBI, que se deriven de su actividad, ya sea de carácter religioso o mercantil".

En este sentido, proponen que los ayuntamientos elaborarán "un censo público de las propiedades de la Iglesia Católica, de otras confesiones que están exentos de pagar el IBI, tanto de centros de culto, como de otras actividades mercantiles o sociales", y en su caso, "un censo de las propiedades rústicas y urbanas de las que se haya apropiado la Iglesia, mediante el sistema de inmatriculación".

Además, piden la "declaración de las fiestas locales en referencia a acontecimientos que unan a todos los ciudadanos y no los referentes a una parte de la ciudadanía que tienen determinadas creencias", o que "el Ayuntamiento, en periodos electorales, sólo facilitará colegios o locales no confesionales y, por lo tanto, libres de simbología religiosa para el ejercicio democrático de votar", entre otras medidas.