La Policía Nacional ha intervenido 710 cajetillas de tabaco de contrabando tras realizar una inspección en un quiosco de la carretera de Trassierra. Según informa en un comunicado, la actuación policial tuvo lugar cuando agentes que realizaban labores de prevención de la delincuencia inspeccionaron un quiosco tras conocer que se estaría dispensando tabaco de contrabando a sus clientes, con el riesgo añadido que eso supondría para su salud, al carecer de cualquier control sanitario.

Los agentes encontraron debajo del mostrador y en el almacén 210 cajetillas de tabaco de distintas marcas, por lo que inspeccionaron también el vehículo de la propietaria del establecimiento, donde fueron halladas otras 500, todas ellas carentes de los correspondientes precintos reglamentarios que acreditarían su lícita importación.