Inés Luque, cuidadora de Barrionuevo 22, y el trabajador municipal Diego Ortega, respectivamente Gitanilla y Clavel de Oro 2017 de la asociación de cuidadores de patios Claveles y Gitanillas, reivindicaron ayer los aspectos más humanos de una fiesta que, justo por eso, «es Patrimonio de la Humanidad», dijo Ortega después de rogarle a los cuidadores de patios a «seguir participando y mostrar al mundo esa forma de vida» que son los Patios Cordobeses. No se quedó atrás Inés Luque al hablar, visiblemente emocionada, del amor que implica cuidar y abrir al mundo un patio cordobés.
Luque y Ortega hicieron estas consideraciones anoche en, a la vez, el institucional y cercano acto de entrega de insignias en la sede del colectivo (San Juan de Palomares 11), en el que las autoridades que intervinieron, como la diputada provincial Aurora Barbero o la concejala de Promoción de la Ciudad, Carmen González, no escatimaron palabras de reconocimiento. Por ejemplo, a Diego Ortega como «un buen servidor público», dijo González. «Diego, te vamos a echar de menos», gritó una cuidadora traduciendo en sentimientos el necesariamente formal discurso oficial. En el acto también se reconoció a Jesús Estepa Domínguez, ganador del 6º concurso de pintura de la asociación, imponiéndose a otros 25 participantes (muchos de ellos llegados de fuera de Córdoba) con su obra Cal, Luz y Color.
