Un grupo de investigadores del Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba (Imibic) desarrolla un proyecto destinado a mejorar la calidad de vida de las mujeres que sufren endometriosis, para lo que pretende impulsar un método de diagnóstico no invasivo de endometriosis que permita realizar una detección precoz de la enfermedad y prevenir su progresión.

Según ha informado el Imibic en un comunicado, este proyecto, que realiza el grupo de regulación hormonal del balance energético, la pubertad y la reproducción de la Universidad de Córdoba (UCO), junto a la Unidad de Gestión Clínica de Ginecología y Obstetricia del Hospital Reina Sofía, y cuyos responsables son los doctores Manuel Tena, catedrático de Fisiología de la UCO, y José Eduardo Arjona, respectivamente, se centra en la búsqueda de nuevos biomarcadores moleculares más sensibles y específicos, que estarán formados por distintas combinaciones y permitirán un diagnóstico más preciso que mejore la calidad de vida de las pacientes.

El coordinador de la investigación, Antonio Romero, ha destacado la importancia de las donaciones para desarrollar proyectos, en este caso la asociación de mujeres afectadas por endometriosis (EsEndo) destinará a este estudio los fondos que recaude en distintas actividades que desarrollarán en los próximos meses.

Entre estas actividades, se encuentra una carrera solidaria organizada por el Ayuntamiento de Langreo (Asturias), celebrada recientemente, y el proyecto 'El camino contigo', en el que el deportista Francisco Murcia recorrerá el Camino de Santiago para ayudar a las mujeres afectadas por esta enfermedad.

La endometriosis, que celebró este lunes su día mundial, es una enfermedad crónica inflamatoria estrógeno-dependiente de origen desconocido, caracterizada por la presencia de tejido endometrial fuera de la cavidad uterina. Este tejido tiene dependencia hormonal del ciclo menstrual, produciéndose sangrado y desprendimiento del mismo con la menstruación. Se sabe que afecta aproximadamente a un diez por ciento de mujeres en edad fértil y no existe un tratamiento curativo.

Los síntomas más comunes son infertilidad, dismenorrea, relaciones sexuales dolorosas, y dolor pélvico crónico. Además de estos síntomas, las mujeres con endometriosis pueden presentar otros síntomas no ginecológicos como son el dolor abdominal o de espalda, dolor al orinar o defecar y hemorragias. La infertilidad puede alcanzar del 35 al 50 por ciento de las mujeres con la enfermedad.

La media de tiempo entre la aparición de los síntomas y el diagnóstico definitivo es de siete a once años. Además, hasta el 30 por ciento de las mujeres con endometriosis son asintomáticas durante una parte importante del curso de su enfermedad, lo que dificulta aún más el diagnóstico temprano.

DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO

Este diagnóstico y tratamiento tardío causa una progresión y empeoramiento de la enfermedad, retrasando además la realización de laparoscopia que en caso de ser necesaria y no realizarse puede dar lugar al desarrollo de endometrioma de ovario.

En este sentido, el desarrollo de la enfermedad hasta etapas más avanzadas (III-IV) produce una gravedad del dolor pélvico que suele acabar con una histerectomía. Además, desde un punto de vista psicológico y social, el impacto es muy considerable, ya que está descrito que el 50 por ciento de las mujeres con endometriosis causa baja laboral.

Este proyecto tiene como objetivo adelantar la detección de la enfermedad y reducir la incidencia de los síntomas, lo que repercutirá en mejorar la calidad de vida de las pacientes.