Cordobés de corazón, Manuel Bordallo fue el único de sus hermanos que nació en La Carlota. De hecho, muy pequeño se trasladó a Córdoba, donde ha permanecido durante más de 50 años. Estudió en el colegio Calderón de la Barca, en la barriada de la Fuensanta, y empezó a trabajar desde muy joven. Antes de llegar al mundo de la hostelería, Manuel se ganaba la vida lavando caracolas, repartiendo leche, en una platería y hasta vendiendo arenques y bacalao. Su primer restaurante fue El Bosque y durante 20 años pasó 20 sitios diferentes con el único afán de aprender de los "grandes maestros".

A la Sociedad de Plateros María Auxiliadora llegó en el año 1999.