Tras la misa de romeros celebrada esta tarde en la iglesia de San Pablo, sede canónica de la hermandad del Rocío de Córdoba, la filial cordobesa ha comenzado su peregrinación a la aldea almonteña para postrarse un año más ante la Blanca Paloma. Ante una gran expectación el Simpecado blanco y oro de la hermandad de Córdoba ha salido de la céntrica iglesia de San Pablo para ser entronizado en la carreta ante la mirada de cientos de personas que se han dado cita para presenciar este momento, donde no han faltado los cohetes, las sevillanas y los vivas a la Blanca Paloma.

Una vez el Simpecado en su carreta exornada con distintas variedades florales, ha comenzado una colorista procesión por el centro de la ciudad en dirección a la Mezquita-Catedral y desde allí hasta el Campo de la Verdad donde espera la comitiva rociera.

Comienza así el camino para la hermandad de Córdoba que este año cuenta con la participación de 14 carriolas y más de 200 peregrinos que llegarán a la aldea tras nueve intensos días de camino.