Investigadores de la Universidad de Córdoba (UCO), en colaboración con científicos suizos, han completado un estudio que demuestra que se puede mejorar la estabilidad de las células solares de bajo coste mediante la introducción de un compuesto orgánico sencillo: el guanidinio.

Se trata de las células solares de tercera generación, concretamente las "perovskitas" de haluro de plomo, un material que permite la generación de electricidad a partir de la luz del sol mediante procesos más simples y económicos que en el caso de las tradicionales células de silicio, según ha detallado la Universidad cordobesa en una nota.

La investigación de la UCO, junto a la École Polytechnique Fédérale de Lausanne (EPFL, Suiza), ha sido publicada en la revista científica Nature Energy, donde se explica cómo han logrado estabilizar las células solares de perovskita mediante la incorporación innovadora de guanidinio, trabajo realizado por Alexander Jodlowski, Gustavo de Miguel Rojas y Luis Camacho, miembros del grupos de investigación FQM-204 del Departamento de Química Física y Termodinámica Aplicada de la UCO.

Este hallazgo supondrá un ahorro energético por la disminución de costes de la producción de células perovskita frente a las tradicionales de silicio, se podrán fabricar placas adaptables y no totalmente rígidas, y será posible que estos sistemas sean totalmente reciclables.