El Gobierno central condiciona la licitación para continuar con la obra de la biblioteca de los Jardines de la Agricultura (o de los Patos) a la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado. En una respuesta a los diputados socialistas Antonio Hurtado y María Jesús Serrano, el Gobierno reconoce que, «si bien en el pasado ejercicio se previó volver a licitar la finalización de la obra a finales del primer trimestre del 2018, una vez resuelto el contrato con la constructora adjudicataria, la citada licitación está supeditada a la aprobación de la ley de Presupuestos Generales del Estado para el año 2018 o bien a la autorización, por razones de especial urgencia y necesidad, del Ministerio de Hacienda».

La respuesta recuerda que el proyecto se adjudicó por 9,4 millones, de los que se han ejecutado 5,4 y quedan pendientes más de 4 millones, por lo que el porcentaje de construcción es del 57%. La obra quedó parada en octubre del 2016 para modificar el proyecto por razones de eficiencia energética. Lo que queda saldrá a concurso por 5,2 millones, según la respuesta, y el coste final ascenderá a 10,6 millones.

El Gobierno central explica en el texto las mejoras introducidas, que son «una total iluminación con lámparas LED, la automatización de la intensidad de la iluminación en función del aporte» de luz natural, «la adecuación de las instalaciones de climatización a los máximos estándares de calidad», y la adaptación «del solar de la biblioteca, tanto en su zona sur de contacto con el parque histórico», como en «su ajardinamiento». A esto se une «la mejora de los aislamientos de cubiertas y fachadas y un nuevo acceso al nivel de lectura infantil, que se vio alterado por la conservación requerida del muro omeya del siglo XI» hallado.

Por su parte, Antonio Hurtado asegura que el Gobierno central «no necesita aprobar los presupuestos porque puede autorizar» la licitación «con el prorrogado» y, sin embargo, «no lo ha hecho», lo que indica «que no tiene prisa». A su juicio, «si hay que esperar a aprobar los presupuestos, se va al último trimestre del año», por lo que habrá un retraso de «seis meses más» en el reinicio de la obra, y «como mínimo». De esa forma, está convencido de que los trabajos no empezarán este año, ya que el concurso necesita unos meses hasta que se produce la adjudicación definitiva.

En otra respuesta anterior, el Gobierno aseguraba que la obra tendrá un sobrecoste de 3 millones y acumulará un retraso de dos años a final del 2018.