El grupo municipal Ganemos Córdoba ha presentado un estudio de casos sobre 60 familias realojadas en viviendas que son propiedad de entidades financieras en la ciudad de Córdoba con el fin de “arrojar luz sobre un drama social, frecuentemente criminalizado y del que en la mayoría de ocasiones sólo se conocen las actuaciones más públicas de la plataforma Stop Desahucios como las imágenes de presión colectiva ante un lanzamiento o las acciones de presión en la calle”, ha señalado el portavoz del grupo Rafael Blázquez.

Elaborado por la Universidad de Córdoba, bajo la coordinación de José María Manjavacas, en la Unidad de Investigación EtnoCórdoba estudios socioculturales, revela entre sus conclusiones la situación de extrema necesidad vital de las personas que optan por el realojo, un fenómeno que se enmarca en una situación de crisis habitacional que en Córdoba se manifiesta de manera relevante con un un 37% de población en riesgo de exclusión social, informa esta formación en un comunicado.

El estudio compuesto por una muestra de 60 familias, un total de 165 personas, es pionero al recoger por primera vez una muestra de estas dimensiones a nivel andaluz. De éstas el 31,5% son menores de 12 años y el 53,4% de las personas adultas objeto del estudio son mujeres. Entre los datos más relevantes que el estudio destaca es que el 94,23% de personas en edad de trabajar son desempleadas, el 23,33% no tiene ningún tipo de ingreso y depende de ayuda de otros familiares o ayudas sociales e institucionales y un 40% apenas alcanza los 500€ mensuales.

Según el coordinador, José María Manjavacas, el resultado de este análisis sociodemográfico “lo que hace es ponernos frente al espejo del rostro del empobrecimiento, precariedad y de la exclusión social que crece con dos bolsas: personas que ya venían de situaciones en riesgo de exclusión que se ha agravado aún más con la crisis y otra bolsa que ha tenido un nivel de inclusión social razonable y la pérdida del trabajo ha llevado de manera acelerada al empobrecimiento” ha manifestado.

Para finalizar, el concejal ha señalado que “es imprescindible visibilizar estas situaciones para poder tomar decisiones al respecto, desde el primer momento del mandato estamos exigiendo a las entidades financieras que pongan a disposición las viviendas vacías y abandonadas para que se puedan habilitar para alquiler social” ha puntualizado.

El estudio presenta entrevistas en profundidad de todo el proceso que viven estas familias como “respuesta ante el desempleo, la precariedad y la falta de recursos” y relata vivencias desde el momento en que se opta por el acceso a esas viviendas vacías, el miedo que se siente la desesperación hasta la acción colectiva así como los primeros pasos para acondicionarla como vivienda y los procesos de negociación con las entidades financieras.