Pacientes cordobesas y también de otras provincias, que son atendidas en el hospital Reina Sofía y en otros centros hospitalarios de la provincia, se están beneficiando de un medicamento, llamado Palbociclib, que está logrando unos resultados esperanzadores contra el cáncer de mama avanzado. Son pacientes que cumplen con unos requisitos concretos y que por ello han sido candidatas a recibir este fármaco en forma de ensayo clínico. El doctor Juan de la Haba, oncólogo de los hospitales Reina Sofía y San Juan de Dios, explica que este fármaco es el primero de una familia de medicamentos llamados inhibidores de ciclinas (proteínas involucradas en la regulación del ciclo celular) que se han incorporado al tratamiento del cáncer de mama que expresa receptor hormonal en fases avanzadas de la enfermedad.

En Córdoba se ha podido acceder a este medicamento a través de programas de investigación vinculados a la Unidad de Oncología Médica del hospital Reina Sofía y al Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba (Imibic). Después de los datos de un ensayo clínico realizado en 165 mujeres, la agencia estadounidense del medicamento (FDA) aprobó el uso de este tratamiento en febrero del 2015, mientras que Europa le dio el visto bueno a finales del año pasado, esperándose que pronto el Gobierno español dé luz verde a su comercialización en España.

De la Haba destaca que el Palbociclib tiene como ventaja que «se administra por vía oral y ofrece mejores resultados, en combinación con tratamientos hormonales, que cuando este segundo grupo de fármacos se usa en solitario». «Con la unión de los dos tratamientos hemos aumentado el control de la enfermedad hasta en 30 meses de media, frente a los 19 de media que se conseguían con la medicación hormonal en exclusiva», expone Juan de la Haba. «Es el avance más importante de los últimos años en el tratamiento hormonal del cáncer de mama avanzado», resalta este oncólogo.

Juan de la Haba precisa que «en la actualidad el Reina Sofía y el Imibic están participando en otros estudios nacionales e internacionales como el Pearl, Parsifal o Flipper y otros que se encuentran en trámites de aprobación que nos van a permitir saber qué beneficios aporta el Palbociclib cuando el cáncer de mama no está en estadios avanzados». Este especialista recuerda que frente al cáncer de mama «se están produciendo avances muy importantes que están logrando curar a más pacientes y controlar con buena calidad de vida a aquellas mujeres para las que no es posible la curación por el momento».

«Todo esto es posible gracias al trabajo del grupo de investigación clínica Nuevas Terapias en Cáncer del servicio de Oncología Médica del Reina Sofía, incluido en el Imibic, y, sobre todo, a la colaboración de las pacientes que entienden la oportunidad que la investigación clínica supone para ellas y para la sociedad», expone De la Haba.

«Se están desarrollando actualmente proyectos vinculados al desarrollo de nuevos fármacos y nuevas indicaciones, teniendo acceso a sustancias dirigidas a dianas específicas para cada uno de los subtipos de cáncer de mama. Tenemos abiertos en la actualidad un amplio abanico de estudios para mujeres con cáncer de mama y mutaciones en los genes BRCA (asociados a cáncer de mama hereditario), tumores hormonales y tumores HER-2 positivos y estamos realizando combinaciones de tratamiento antiangiogénico e inmunoterapia con resultados alentadores. También estamos desarrollando proyectos relevantes (dentro de grupos y redes de investigación como Geicam y Ciber) que llevan a cabo estudios que tratan de vincular la expresión de genes asociados a hipertensión y a la respuesta a la terapia antiangiogénica en cáncer de mama o que persiguen definir un subtipo genético especifico de cáncer de mama gestacional», añade Juan de la Haba.