El delegado de Cultura, Francisco Alcalde Moya, fue ayer el encargado de exaltar la Navidad de la ciudad en un acto celebrado en el salón de actos de la Diputación y organizado por la Asociación Cultural Belenista de Córdoba, con presencia de la diputada de Consumo, Aurora Barbero.

Alcalde, que fue presentado por el presidente del Parlamento andaluz, Juan Pablo Durán, comenzó el pregón cantando los célebres Campanilleros acompañado tan solo de una guitarra. A continuación fue desgranando un texto que dividió en tres partes y donde el exaltador habló de la tradición belenista de la ciudad destacando la labor de la asociación cordobesa por mantener viva esta tradición tan española.

Asimismo, señaló cómo el pueblo dio «vida al belén» a través de los populares villancicos. Para concluir su exaltación Alcalde trató de forma amena cómo se vive la Nochebuena en una familia cordobesa, sin olvidar a los más desfavorecidos de la sociedad para los que «la Navidad no es tan opulenta». El pregonero concluyó su disertación con un sentido romance donde resumió las fiestas navideñas, poniendo el punto final con un «¡Viva la Navidad!».

Un pregón que contó con el acompañamiento de la voz de Francisco Mira y el piano de Marcos Monje, que fueron intercalando a lo largo del acto un repertorio de villancicos tradicionales. Previo al pregón, un año más la Asociación Cultural Belenista, que preside Rafael Ramos, inauguró el belén monumental que durante toda la Navidad estará instalado en la Diputación de Córdoba. Asimismo, se hizo entrega de una ayuda de la obra social de la citada asociación que cada año dedica a una institución, un generoso gesto que este año ha recaído en la diputación de caridad de la hermandad de la Merced, parroquia de San Antonio de Padua.

La noche concluyó con un momento de convivencia en el Palacio de la Merced, donde no faltaron el anís y los tradicionales pestiños.