La fiscalía de Córdoba ha abierto una investigación para determinar si hubo un robo de un recién nacido en un hospital de la capital cordobesa. Según ha informado el fiscal jefe, José Antonio Martín-Caro, la Fiscalía General del Estado (FGE) remitió un disco que contenía alrededor de 200 denuncias de supuestos robos de bebés en toda España "y entre ellas había una referida a Córdoba".

Estas denuncias partieron de la Asociación Nacional de Afectados por Adopciones Irregulares (Anadir), que el pasado 11 de enero presentó una demanda colectiva ante la FGE .

Todos los demandantes acudieron a la sede de la Fiscalía portando pancartas en las que denunciaban la existencia de unos 300.000 casos relativos a la sustracción de niños recién nacidos en diversas clínicas, a cuyos progenitores se les comunicaba su fallecimiento, y que eran entregados a otras familias previa falsificación de los documentos necesarios, según publicó Europa Press en su día.

Los casos se produjeron, según la documentación que ha recabado la asociación, en un periodo amplísimo que se extiende desde los años 40 a los 90.

Anadir ha presentado cientos de pruebas, como partes de defunción falsos, confesiones de enfermeras o padres que compraron niños y pruebas de ADN. Según su abogado, Enrique Vila, la estructura de robo de niños del franquismo desveló un "potencial negocio" y aunque "todo empezó por motivos políticos, al final cualquier niño podía ser una víctima". Una de las mayores dificultades a la hora de investigar las adopciones es que durante años se efectuaron mediante acuerdos privados.