El exgerente del hospital Reina Sofía y actual gerente del SAS, José Manuel Aranda, prestó ayer declaración, por videoconferencia, ante el juzgado de instrucción número 7 de Córdoba por uno de los casos de klebsiella registrados en el citado centro hospitalario en los último años.
En concreto, se trata de una mujer que falleció en agosto del 2013, por un fallo multiorgánico, que la acusación considera que se produjo como consecuencia de la infección por la citada bacteria de la enferma, que ya padecía otras patologías anteriores.
Según explicó ayer a este periódico el abogado de la acusación, Federico Medina, el entonces gerente del hospital ha respondido a las preguntas sobre si se cumplió o no con el protocolo establecido para este tipo de contagios, a lo que Aranda contestó, según Medina, que ese tipo de protocolos no eran de su competencia y que por lo tanto no los conocía al detalle.
Además, sigue explicando el abogado que también negó Aranda que este problema tenga relación con los recortes sufridos por el hospital, asegurando que no se ha reducido el gasto médico sino que se organizó un gasto más eficiente en algunas materias.
El caso por el que declaró ayer José Manuel Aranda es uno de los cinco que hay abiertos actualmente en los juzgados de Córdoba por personas que fallecieron, presuntamente, por el contagio de la klebsiella, por el que se pide responsabilidad penal a 7 facultativos y al gerente. H
