El 75 por ciento de los delitos son cometidos por hombres y la mayoría de los cometidos por mujeres tienen una naturaleza sociológica, según ha afirmado la profesora de Derecho Comparado y Criminología de la Universidad Camilo José Cela y primera ponente del Plan de Extensión Universitaria del Postgrado de la Universidad Loyola Andalucía, Gudrun Stenglein, quien ha ofrecido la ponencia 'Condición femenina y delincuencia', en la que ha presentado un estudio político-jurídico sobre el delito femenino en España y Alemania.

Según ha informado Loyola Andalucía, su Plan de Extensión Universitaria del Postgrado es una actividad organizada por el Vicerrectorado de Investigación y la Biblioteca de dicha universidad privada andaluza que se desarrollará en cuatro sesiones, las cuales incluirán ponencias, presentaciones de libros y coloquios. En esta primera sesión, Gudrun Stenglein también ha hablado a los 'Consejos para realizar una tesis internacional: de la hipótesis a la publicación de la monografía'.

Para Stenglein, que desarrolló una carrera policial en Interpol antes de incorporarse al ámbito académico, "la delincuencia masculina y la femenina no son equiparables, estadísticamente la mujer comete delitos leves y la criminalidad femenina es menos violenta". En su estudio, la profesora Stenglein afirma que las teorías sociológicas pueden aportar explicaciones a esta diferenciación delictiva: "El 80% de las mujeres encarceladas en Andalucía son madres solteras, la mayoría de los delitos que cometen son contra el patrimonio o por drogas, delitos por necesidad para sacar adelante familias, y la mayoría no reinciden".

Una de las principales conclusiones del estudio de Gudrun Stenglein incide en la procedencia de clases marginales de la mayoría de mujeres que delinquen. "La mayoría tienen escasa formación escolar o profesional y casi la mitad de ellas han sido víctimas de violencia", según ha afirmado la profesora de Criminología.

Por esa diferencia de género en el delito, Stenglein considera que "la política penitenciaria española y europea es discriminatoria e hipócrita". En su opinión, "la gran mayoría de mujeres no deberían ser encarceladas, en la mayoría de los casos bastaría con planes de prevención del delito y de reinserción social".