«Estaba en un agujero negro, pero ahora ya veo la luz». Carlos Ortega tiene 54 años y, después de dos décadas dedicado a la platería, estuvo tres años en el paro. Llegó a deber siete meses del alquiler de la casa, por la que paga 346 euros. Su situación era insostenible, según sus propias palabras, hasta que lo contrató la empresa de inserción laboral Solemccor, perteneciente a Cáritas, para el servicio de recogida de cartón y papel puerta a puerta. Dicho servicio se incluye en un convenio suscrito entre Cáritas y Sadeco para dar empleo a personas en situación de vulnerabilidad, y consiste en recoger los cartones y los papeles que generan a diario los comercios. Los trabajadores van con una bicicleta al mismo establecimiento y se llevan el material, que no pasa así por el contenedor.

Las personas que pueden beneficiarse de este proyecto de empleo son aquellas a las que los servicios sociales comunitarios del Ayuntamiento consideran en situación de exclusión social, según apunta José Repiso, responsable de Solemccor. Desde que se puso en marcha en febrero del año pasado, ha dado empleo a cuatro personas, tres hombres y una mujer. «Es una manera de que estas personas se incorporen al mercado laboral», indica Repiso, quien apunta que la gente rota en este tipo de puestos, de manera que el tiempo máximo de prestación del servicio se fija en tres años. En concreto, en la recogida puerta a puerta no se puede estar contratado por más de dos años, favoreciendo así que accedan más personas que lo necesitan.

Carlos Ortega lleva quince meses en este trabajo. «La mayoría de los comercios colaboran, entre otras cosas porque saben que hacen mucho bien», afirma este recogedor de papel y cartón. Ortega hace hincapié en un aspecto fundamental de este proyecto de empleo, y es que «no te están dando una limosna, sino que te tienden puentes para que en un futuro puedas encontrar un trabajo». Este hombre asegura que «estando en la calle con este servicio conoces y hablas con mucha gente todos los días, así que espero y confío en que eso me ayudará a tener un empleo». Él desempeña su labor en la avenida Barcelona, Rescatado y Viñuela, los lunes, miércoles y viernes de 9.00 a 14.00 horas, y en Santa Rosa los martes y jueves en el mismo horario de mañana. Además, todas las tardes, de 17.00 a 19.00 horas, trabaja por los comercios del centro. Además de estas zonas iniciales y del casco histórico, el servicio se ha extendido a principios de este mismo mes de mayo a los barrios de Ciudad Jardín, Zoco y Parque Cruz Conde.

Desser es uno de los muchos negocios del centro que colaboran con este proyecto. El responsable de esta tienda de ropa ubicada en Manuel de Sandoval, Fernando Romero, indica que las personas que realizan este servicio «son muy agradables, educadas y puntuales», y añade que este tipo de programas «son una oportunidad única de ayudar a personas que de verdad lo necesitan y que de verdad hacen bien su trabajo».

Este plan de recogida puerta a puerta se engloba en otro de mayores dimensiones que también desarrolla Solemccor en virtud a un acuerdo con Sadeco para la recogida de papel y cartón por las calles de la ciudad con vehículos destinados a esta actividad con unas rutas preestablecidas. También prestan el servicio de destrucción confidencial con la máxima garantía y seguridad al precio más competitivo, o la recogida gratuita de aceite vegetal usado, una actuación con la que se fomenta el reciclaje del aceite de cocina usado y, al mismo tiempo, se genera empleo derivado de la recolección y posterior reciclaje de este residuo en Córdoba.

Entre todas las actividades que desempeña, Solemccor da empleo a un total de 77 personas, de las que 44 se encuadran en puestos de trabajo de inserción. Tanto la presidenta de Cáritas en Córdoba, Mar Vallecillo, como el de Sadeco, Pedro García, se han felicitado por la colaboración entre ambas entidades, que dan una oportunidad a personas en riesgo de exclusión social.