La alcaldesa de Córdoba ha asistido en la mañana de este sábado al tercer Encuentro de Bolillo, que reúne en Cerro Muriano a más de mil encajeras y encajeros llegados de todo el país.

Según informa el Ayuntamiento de Córdoba, en una nota de prensa, la alcaldesa ha calificado este encuentro como "un espacio de convivencia y una cita que se está abriendo paso en la primavera festiva de Córdoba".

UNA TRADICIÓN "MUY VIVA"

Ambrosio ha asegurado que aunque el bolillo “pueda parecerle a algunos una tradición a punto de extinción, o algo del pasado, lo cierto es que el encaje de bolillo es una labor muy viva, como lo demuestra este tipo de encuentros, donde se reivindica un arte que, está muy vivo”.

La vigencia de este tipo de artesanía queda demostrado por el hecho de la gran cantidad de participantes que se dan cita en estos encuentros, donde no se para de innovar, como esta mañana ha demostrado el maestro bolillero Angel Sánchez Silvestre, que desde ayer está enseñando como tejer su “Arabesco cordobés”, una auténtica joya de esta técnica que se inspira en diseños de la ciudad califal de Medina Azahara, en vísperas de que pueda ser declarada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Ambrosio ha señalado que “quienes estáis aquí esta mañana sois las artífices, de que el encaje de bolillo no sea algo que sólo pueda contemplarse en los museos, sino que se desarrolla todavía al calor de las mesas camillas en invierno y del fresco de los anocheceres en verano.”

A POR EL GUINESS

La alcaldesa ha asistido también a la confección de una puntilla humana, en en la que los bolillos son personas y que aspira a entrar en el libro Guiness de los records. Un aliciente y un atractivo más de este encuentro, que volverá a tener en los más pequeños protagonistas de futuro, en este caso con el desfile de moda flamenca infantil con sus correspondientes encajes, a cargo de Begova.

Para concluir, la alcaldesa ha invitado a los participantes en este encuentro, a que saquen su faceta más solidaria y visiten el stand solidario de los alumnos del CEIP Santa Bárbara, el colegio de la barriada, que han participado en el proyecto AGORA, de Participación Ciudadana, cuya recaudación se donará a una ONG que trabaje con víctimas de violencia de género.