Más de 9.000 enfermos cordobeses con cáncer o leucemia o que padecen dolencias crónicas (como la esclerosis múltiple o artritis reumatoide, entre otras) se van a ver afectados por el nuevo copago sanitario, que el Ministerio de Sanidad quiere implantar en toda España a partir del 1 de octubre. En contra de la medida está el PSOE cordobés, que anunció ayer, a través de su portavoz parlamentario en la Comisión de Salud , Jesús María Ruiz, que "va a presentar en el Parlamento andaluz una proposición no de ley para rechazar el copago de medicamentos hospitalarios que quiere imponer el PP y que las comunidades autónomas, aunque lo rechazan, tienen la obligación de aplicar".

Ruiz indicó que la proposición tiene como objetivo exigir la retirada de esta medida "injusta y que atenta contra la equidad" en materia sanitaria. Jesús María Ruiz explicó que este nuevo copago establece que esos más de 9.000 cordobeses tendrán que sufragar el 10% del coste del medicamento, con un tope máximo de 4,20 euros por tratamiento, "por lo que el motivo de esta medida no es el ahorro ni causar un efecto disuasorio, sino que es meramente recaudatorio, sin haber tenido en cuenta que los costes burocráticos que genera son mucho mayores que el ahorro que va a suponer". El portavoz parlamentario en Salud destacó que este copago supone un "gran peligro" para los enfermos, que "ante la imposibilidad de sufragar el 10% que tienen que pagar dejen de tomar los medicamentos y se agrave su estado de salud, lo que redundará en más ingresos hospitalarios y coste sanitario".

Por su parte, la secretaria de Salud del PSOE de Córdoba, María Angeles Luna, añadió que el PSOE presentará "mociones en todos los ayuntamientos de la provincia para pedir que se retire esta medida". Una intervención que, según Luna, vulnera el artículo 43 de la Constitución "porque atenta contra el derecho a la salud y quiere desmantelar el Estado de Bienestar".

LOS AFECTADOS Por su parte, la presidenta de la Asociación Española contra el Cáncer en Córdoba, María Luisa Cobos, se mostró "contraria" a este nuevo copago, "ya que encima que una persona sufre cáncer tiene que pagar por ello. La economía del enfermo oncológico muchas veces se resiente, porque personas de su entorno tienen que dejar de trabajar para apoyarles en el tratamiento. Creo que el Gobierno puede sacar el dinero de otro sitio". Más crítico aún fue el presidente de la Asociación Cordobesa de Enfermos de Artritis Reumatoide (Acoare), Juan Luque, que sugirió que "antes de tomar decisiones como este nuevo copago, nuestros gobernantes deberían ponerse en el dolor de los pacientes y no ajustar las cuentas a costa de los enfermos. Actúan de forma cruel. Quienes les asesoran no tienen en cuenta a los que sufren enfermedades".

"Indignado con este nuevo copago", se sentía ayer el presidente de la Asociación Cordobesa de Esclerosis Múltiple (Acodem), Antonio Galindo. "Ante estas medidas piensas que Sanidad quiere que los enfermos fallezcan para dejar de pagarles los tratamientos, sin pararse a pensar que obligándoles a desembolsar más, habrá afectados que no sigan bien el tratamiento y se producirán más ingresos hospitalarios. El Gobierno quiere que los enfermos, muchos pensionistas, saquemos adelante el país. La medida no ha sido una sorpresa. Se venía anunciando".