El hospital universitario Reina Sofía de Córdoba recibió ayer a una delegación de la Universidad de California en Davis (Estados Unidos). El objetivo de la visita es la puesta en común de avances en el proyecto de investigación clínica en el que trabajan ambos centros.

Durante la visita, que durará dos días, la delegación estadounidense mantendrá reuniones con representantes de los equipos de Cirugía Cardiovascular, Radiología Vascular y Terapia Celular del hospital y visitará la nueva sede del Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba (Imibic). La colaboración entre el centro sanitario cordobés y la Universidad de California se inició en 2012 fruto del convenio firmado en 2010 entre la Iniciativa Andaluza de Terapias Avanzadas y el California Institute for Regenerative Medicine (CIRM).

Ambos centros trabajan de forma paralela en un ensayo clínico fase I de terapia celular y génica en el que se emplearán células madre mesenquimales alogénicas modificadas genéticamente para evitar amputaciones por isquemia crítica de miembros inferiores, un cuadro común en pacientes diabéticos. Esta condición se produce por obstrucción severa de las arterias, reduciendo el riego sanguíneo en pies y piernas con el consiguiente riesgo de sufrir amputaciones.

COMBINACION "El verdadero potencial de este estudio radica en la combinación de la terapia celular con la terapia génica para conseguir que las células mesenquimales modificadas genéticamente produzcan una mayor cantidad de factor de crecimiento endotelial vascular, una proteína que estimula el crecimiento de los vasos sanguíneos y que esperamos que logre que el trasplante de células madre obtenga un efecto terapéutico mayor en el paciente para revascularizar la zona afectada", ha destacado la doctora Concha Herrera, directora de las unidades de Hematología y Terapia Celular y una de las responsables del estudio.

La colaboración internacional es un factor clave para el éxito de este ensayo clínico. "Gracias al trabajo colaborativo entre ambos centros será posible comparar la misma terapia administrada por dos vías diferentes: en California se hará de forma intramuscular y en Córdoba se infundirán por vía intraarterial, de modo que se podrá analizar cuál de las dos vías de administración es más segura y presenta mayores indicios de efectividad", ha afirmado Fernando Fierro, miembro del Programa de Investigación con Células Madre del centro californiano.

El estudio, que tendrá una duración de cuatro años, se encuentra actualmente en su fase preclínica y, una vez que la supere comenzará el ensayo clínico con 20 pacientes en cada uno de los centros respectivamente.