El hospital universitario Reina Sofía realizó 162 trasplantes de órganos en el 2012, una cifra que representó un descenso del 15% con respecto al año anterior, según la información publicada ayer por la Consejería de Salud. En este sentido, en el conjunto de la comunidad autónoma se practicaron 734 injertos de este tipo, lo que supuso un nuevo récord por el leve incremento con respecto al 2011, y los hospitales con más trasplantes fueron el Regional de Málaga (201) y el Virgen del Rocío de Sevilla (189). Tras el Reina Sofía (162) están el Virgen de las Nieves de Granada (109) y el Puerta del Mar de Cádiz (73).

En cuanto a los órganos que fueron más trasplantados en Córdoba, 63 de estas operaciones fueron de riñón; 49 de hígado, 24 de pulmón, 15 de corazón y 11 de páncreas. Del total de intervenciones, 14 fueron realizadas a niños. Desde el complejo hospitalario han destacado que la cifra de trasplantes renales de donantes vivos ha crecido un 133%, pasando de los tres contabilizados en el 2011 a los siete del último año. Asimismo, el Reina Sofía efectuó en el 2012 el único injerto de donante vivo hepático practicado en Andalucía, que fue recibido por un paciente de pediatría.

El coordinador regional de Trasplantes, Manuel Alonso, afirmó ayer que el número de intervenciones alcanzado en Andalucía es histórico y recordó que responde a las estrategias desarrolladas por el Servicio Andaluz de Salud, ya que debido a la bajada de las muertes encefálicas y los accidentes de tráfico "hubiéramos asistido con toda seguridad a un descenso de las cifras de donantes y trasplantes".

En esta línea, Córdoba registró en el 2012 un aumento del 5% en las donaciones, hasta llegar a 41, mientras que en Andalucía descendieron de forma muy leve hasta las 305. Los datos de Salud apuntan que el donante de órganos fallecido tiene una edad media de 60 años y los menores de 45 años representan solo el 17% del total. Por otro lado, en el caso de los donantes vivos, el 63% son mujeres y la mayoría tenía una relación paterno--filial con el receptor, mientras que otros eran parejas y hermanos del paciente.