Concepción Ortega Fernández es la diputada responsable de la Comisión de Violencia de Género del Colegio de Abogados y responsable del Servicio de Asesoría Jurídica Gratuita a Víctimas de Violencia de Género.

--¿Qué servicios de atención a las mujeres víctimas de violencia de género ofrece el Colegio de Abogados de Córdoba?

--El Colegio de Abogados, en colaboración con el Ayuntamiento de Córdoba, puso en marcha en 2007 el Servicio de Asesoría Jurídica Gratuita a víctimas de la violencia de género a través de un convenio que hemos venido renovando anualmente. El objetivo que nos marcamos entonces, y que hemos venido reforzando con firmeza es proporcionar a las mujeres que sufren este maltrato, el asesoramiento, la información y formación necesarios para facilitar su defensa y su protección, como paso previo al inicio de los procedimientos judiciales.

--¿Qué destacaría de este servicio?

--Este servicio reviste la singularidad de ser prestado por tres letrados en ejercicio, especialistas en violencia de género; lo que conlleva, gracias a su experiencia diaria, que el asesoramiento jurídico sea eminentemente práctico y, por tanto, más eficaz y resolutivo para las situaciones que plantean las mujeres víctimas o sus familiares cuando acuden a él. La más estricta confidencialidad está garantizada y les ofrecemos también, la información necesaria para el acceso a las ayudas y los recursos sociales a los que pueden acceder, así como para iniciar los trámites para solicitar un abogado de oficio, en aquellos casos que lo requieran.

--¿Qué valoración hace del trabajo que vienen realizando los abogados de oficio en materia de violencia de género?

--El Colegio tiene en marcha, a disposición de los ciudadanos, un Turno de Oficio especial de violencia de género, formado por los letrados que anualmente y voluntariamente, se inscriben en él y realizan el curso obligatorio específico de especialización en materia de violencia de género. La valoración es muy positiva porque todos los abogados inscritos están muy sensibilizados con las situaciones relacionadas con el maltrato. Tienen la formación específica para dar la respuesta jurídica más adecuada y están muy implicados en el trabajo que llevan a cabo.

--¿Qué consejo le da a las mujeres que están siendo víctimas de violencia de género?

--El único consejo que se les puede dar es que no sigan soportando la situación de violencia, ni por ella ni por las personas que la rodean. Que pidan ayuda, bien sea mediante el Servicio de Asesoramiento a la mujer del Colegio, o a través del resto de instituciones a las que pueden acceder. Por supuesto, no podemos obligarlas a dar el paso, pero sí aconsejarlas y asesorarlas, apoyándolas en las decisiones que tomen.

--Como abogada, ¿cuál considera el principal vacío al que se enfrentan las víctimas de violencia de género al adentrarse en un proceso judicial?

--Por desgracia, a los problemas específicos de vivir una situación de maltrato que ya sufren estas mujeres se suma la falta de medios para la aplicación de lo que la Ley recoge.

--El Observatorio contra la Violencia Doméstica viene detectando un aumento de este comportamiento violento en adolescentes de entre 14 y 17 años. ¿Lo ha detectado la Abogacía?

--Lo hemos detectado con preocupación y por ello, hemos venimos insistiendo y reforzando la formación a los menores ante determinadas conductas violentas, dándoles una perspectiva más amplia, de todos los aspectos legales que se presentan o pueden presentar en una resolución de un conflicto de violencia de género. Las abogadas del Servicio de Asesoramiento de Violencia de Género tienen una función de formación y asesoramiento a colectivos, asociaciones y organismos implicados en la lucha contra la violencia de género y que así lo requieran, incluyendo de forma muy específica una formación a los menores. En este momento están en marcha programas como "Amar de buen rollo", que ofrecerá talleres de prevención de la violencia de género a alumnos de 4º de la ESO de distintos institutos de Córdoba y en el que estamos participando desde el servicio, concienciando a los menores para que aprendan a identificar determinadas conductas violentas e informándoles de las repercusiones que éstas pueden tener desde el punto de vista jurídico penal. La Diputación Provincial tiene un proyecto similar, llamado Cómplices en el cariño, a través del que se va a distribuir un tríptico en los lugares más frecuentados por los jóvenes, como institutos, centros cívicos y establecimientos de ocio, facilitándoles información muy útil para que aprendan a identificar las situaciones de maltrato.