La entrega de llaves de viviendas protegidas era algo que ocurría con más asiduidad en tiempos de bonanza. Sin embargo, con la llegada de la crisis las administraciones restringieron sus inversiones en obras, las familias encontraron más dificultades para lograr financiación para comprar un piso y acontecimientos como este, tan especiales para los que esperan con ilusión un hogar, dejaron de producirse con la misma frecuencia. Por eso ayer causó tanta expectación la entrega de llaves que tuvo lugar en pleno corazón del conjunto histórico, en la plaza de La Corredera. Allí, nueve familias recibieron las viviendas que llevan años esperando y en las que residirán en régimen de alquiler. La Junta, a través de la Consejería de Fomento y Vivienda, ha rehabilitado dos inmuebles que compró en la década pasada (los números 16 y 17) y ha construido nueve pisos cuyas obras adjudicó en el 2007 y que sorteó en diciembre del 2008, hace casi una década. Entre sus futuros moradores, hay familias que llevan aguardando desde entonces.

La secretaria general de Vivienda de la Junta, Catalina Madueño, y la delegada de Fomento, Josefina Vioque, visitaron ayer los pisos, entre los que hay cuatro de tres dormitorios, uno de dos y cuatro de uno. Madueño considera que esta actuación «demuestra que, en un entorno histórico como este, de gran valor y donde es difícil, costoso y largo actuar, es posible» la rehabilitación de viviendas.

Las viviendas tienen una superficie que oscila entre 51,13 metros cuadrados y 78,04 y cuestan entre 187 y 295 euros al mes. Al tratarse de un edificio protegido, la Junta ha tenido que conservar la estructura de la primera crujía y respetar la tipología del interior. Los trabajos han consistido en la demolición de todo excepto de la primera crujía y en la construcción de las nueve viviendas y de un local comercial. Los arquitectos Pedro García del Barrio y Francisco Gómez Díaz son los autores del proyecto. En esta intervención, la Junta ha invertido 882.186 euros, entre los 107.821 que le costó la compra y los 774.265 destinados a la obra, ejecutada en varias fases por las numerosas vicisitudes que ha tenido, con concurso de acreedores y modificaciones de proyecto incluidas. Ya en el 2013 la entrega era inminente y se ha demorado hasta ahora.

Seis de las nueve familias fueron elegidas a través del registro de demandantes que está activo desde el 2009, dos resultaron agraciadas en el sorteo del 2008 y hay otra que ya vivía allí cuando la Junta compró el edificio, por lo que tenía un piso reservado. Entre los inquilinos está Cristina Montero, que vivirá con su hijo en un piso de tres dormitorios que lleva esperando casi diez años, ya que ella fue una de las afortunadas del sorteo del 2008. «Estoy muy contenta», «no me lo esperaba así» y «el sitio es fantástico» decía mientras mostraba su nuevo hogar, que le permitirá independizarse de su madre, con la que ha residido hasta ahora.

Más tiempo llevan aguardando una vivienda Silvia Soto y Rafael Torrico, que fue desalojado hace doce años de un piso de Acera del Río. «Nos parece mentira», aseguraba ayer, sin creerse aún que podrán dejar el «piso puente» en el que han estado residiendo los últimos dos años. «Lo hemos pasado fatal», asegura Silvia, «hemos estado hasta cinco personas compartiendo una habitación para pagar menos».

Manuel García es uno de los vecinos que podrá disfrutar de las vistas que le brinda La Corredera desde los balcones de su piso de un dormitorio, que ayer mostraba ilusionado. Manuel lleva esperando ocho años una vivienda en alquiler que ha conseguido a través del registro de demandantes. Hasta ahora compartía piso en Ciudad Jardín, donde pagaba un alquiler de 500 euros, que ahora se queda en 186.

«Contenta», aunque no satisfecha del todo, se mostraba Valle Reinoso, a la que le ha costado una espera de doce años lograr una VPO de alquiler. Valle y su familia piensan que hay aspectos de su nueva casa que podían estar mejor, aunque valoran el cambio que supone dejar el piso en el que vivían en el Parque Azahara por este nuevo hogar en pleno corazón de la ciudad.