La modificación presupuestaria de 938.600 euros realizada el pasado mes de junio por el gobierno municipal para abonar facturas atrasadas de la luz fue objeto ayer de una crítica por parte del viceportavoz del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Córdoba Salvador Fuentes, que señaló que «estamos viendo un desfase de un millón de euros para consumo de energía, cuando se presume de que se iba a ahorrar». Así, el viceportavoz del PP recordó que a finales del año pasado el Ayuntamiento calculó que podría recortar su gasto en electricidad en 400.000 euros.

El decreto por el que se aprobó esta medida indica que el objetivo es atender pagos pendientes de Endesa correspondientes al 2015 y a la prórroga del contrato, y detalla que el dinero sale de una partida para estudios y trabajos técnicos de alumbrado público. En esta línea, Fuentes se preguntó qué proyecto tiene esta cuantía o si se trata de «un cajón de sastre», y destacó que, a su juicio, la modificación presupuestaria pone de manifiesto que las cuentas «no se hacen con el rigor necesario, no se sabe con claridad a dónde van las partidas».

Por su parte, la delegada de Infraestructuras en el Ayuntamiento de Córdoba, Amparo Pernichi, detalló que este movimiento se ha debido a que «los contratos de suministro eléctrico se regularizan cuando se acaban» y el gobierno local puso uno nuevo en marcha el pasado enero. En abril, Endesa les comunicó la cuantía necesaria para cubrir la deuda pendiente, indicando que ascendía a 938.600 euros, pero el Consistorio lo analizó y detectó un error en el cálculo de esta compañía, por lo que el importe se redujo a solo 300.000 euros. Pernichi afirmó que la regularización «ha sido prácticamente la misma todos los años». P.C.A.