La Policía Nacional ha descartado la intervención de terceras personas en la muerte producida el sábado junto al arroyo Pedroches, que se trate de un ajuste de cuentas y que el suceso esté relacionado con una banda criminal. Según informaron ayer fuentes policiales, el cuerpo sin vida que se encontró parcialmente quemado el sábado junto a una de las cintas transportadoras que conecta la cementera Cosmos con una cantera corresponde a un español residente en Córdoba y no existe ninguna conexión con grupo violento alguno.

Según explicaron otras fuentes, todo apunta a que se trata de un suicidio, una vez que se han conocido los primeros resultados de la autopsia realizada ayer por la mañana en el Instituto de Medicina Legal de Córdoba. Al mismo llegó el cadáver la noche del sábado, una vez que el juez en funciones de guardia autorizó el levantamiento. La Policía había recibido aviso del 112 después de que una llamada alertara sobre las 18.10 horas de la existencia de un cadáver, al parecer calcinado, junto al arroyo Pedroches. Tras las investigaciones llevadas a cabo desde ese momento, finalmente se ha descartado que se trate de un homicidio. La muerte, además, se habría producido tan solo unas horas antes de ser hallado el cuerpo sin vida, según apuntaron las mismas fuentes.

Nada más conocerse la alerta, el 112 activó el protocolo para estos casos, dando aviso a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad y a los servicios sanitarios, que no pudieron hacer nada. Junto al cadáver había una huella negra en la que se habrían producido las llamas que, al parecer, pudieron acabar con la vida del hombre.