Una familia con dos menores a cargo, una niña de ocho años y un bebé de cuarenta días, fue desalojada en la mañana de ayer de su vivienda de Campo San Antón. La plataforma Stop Desahucios acudió para intentar parar el lanzamiento, decretado por el juzgado, pero fue en vano, ya que cuando llegó al lugar la Policía había actuado, y la familia, junto a sus pertenencias, se encontraban en la calle. Fuentes de esta asociación aseguran que la familia estaba en negociaciones con la entidad bancaria denunciante, a fin de demorar en un mes el desahucio para encontrar una solución habitacional alternativa, en especial consideración por la situación del bebé, prácticamente un recién nacido. Pese a ello, no se tuvo en cuenta esta circunstancia y, «en contra de lo prometido a la Oficina Municipal de la Vivienda», finalmente se produjo el lanzamiento de la vivienda.

Tras unas horas en la calle, finalmente la familia fue realojada en una vivienda de un familiar paterno, a la espera de que el Ayuntamiento les ofrezca una alternativa distinta a la inicial de una pensión, que fue rechazada por los padres. Actualmente, se encuentran en trámites de acceder a una ayuda al alquiler por parte de Vimcorsa, dado que carecen de ingresos fijos. La madre se encuentra desempleada, mientras que el padre solo tiene trabajos a tiempo parcial que, según Stop Desahucios, lo que impide el pago mensual de un alquiler al precio del mercado.