Miraflores sigue siendo el emplazamiento ideal del centro de congresos. El Colegio de Arquitectos asegura en una nota que esa es la opinión de los ponentes del debate celebrado en la sede de este órgano, en el que participaron el exgerente de Urbanismo que impulsó el proyecto del arquitecto holandés Rem Koolhaas, Pedro García del Barrio, y el arquitecto Rafael de la Hoz, autor del estudio previo del centro de convenciones y exposiciones del Parque Joyero. El debate estuvo moderado por Joaquín Gómez de Hita.

Según el Colegio de Arquitectos, desde el punto de vista urbanístico, hay un acuerdo generalizado en reconocer que la ubicación de Miraflores es inmejorable, por su cercanía al casco histórico, sus monumentos, hoteles, restaurantes y comercios". Además, cuenta con buenas condiciones de acceso y se integra en un entorno privilegiado. García del Barrio recordó los estudios que se hicieron para su elección, tanto en el plan estratégico como en el PGOU, y señaló que no se han producido cambios que hagan necesario replantearse la decisión.

Por su parte, Rafael de la Hoz criticó el proyecto de Koolhaas "por su falta de respeto al contexto de una ciudad histórica" y porque será "una terminal de aeropuerto frente a la Mezquita". Reconoció que "el proyecto del Parque Joyero tiene más de recinto ferial que de centro de congresos, que se justifica si no exige una inversión importante" y que Miraflores sería el mejor lugar para un centro de congresos. Reconoció que debe reforzarse la estructura del edificio de Cajasur y que se plantea que la mayor parte de su superficie quede destinada a ferias y exposiciones, complementadas con una o dos salas congresuales.

Los participantes coincidieron en señalar los problemas que puede plantear la recuperación del pabellón del Parque Joyero, su entorno industrial, las dificultades de accesibilidad y su lejanía del conjunto histórico.