El Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, se comprometió ayer a retomar la cuestión de la Mezquita Catedral de Córdoba y hacer las gestiones pertinentes ante la Junta de Andalucía tras una reunión con la plataforma ciudadana celebrada esta semana en Sevilla. Después de cuatro años del nacimiento del colectivo que demanda la titularidad pública del monumento omeya y una gestión profesional, la administración autónoma andaluza «no ha contestado ninguna de la decena de solicitudes, informes y documentos presentados por la plataforma sobre la progresiva desvirtuación de la huella andalusí por parte del Obispado», precisó el colectivo en una nota.

Así, la plataforma ha elevado una queja ante el Defensor en protesta por el silencio administrativo y la «desconsideración» de la Junta de Andalucía hacia una demanda ciudadana que cuenta con el respaldo de casi 400.000 firmas. «Esa actitud no se compadece con la ley de transparencia», señaló Maeztu ante el portavoz de la plataforma, Miguel Santiago. El Defensor anunció que impulsará las iniciativas oportunas para que la Consejería de Cultura, institución responsable de la tutela y vigilancia del patrimonio histórico, atienda y dé respuesta a los requerimientos del colectivo. La plataforma entregó asimismo un informe sobre el uso abusivo y desnaturalización de la Mezquita Catedral que recoge numerosas anomalías en la gestión del tesoro omeya.

«En su afán por mutilar la identidad árabe del edificio e imponer una visión excluyente católica, el Obispado ha invadido el muro de la quibla, el más importante del conjunto monumental, de elementos ajenos que distorsionan su narración arquitectónica. Asimismo, colapsa el mundialmente famoso bosque de columnas de exposiciones y muestras continuas sin criterio museístico coherente que impiden al visitante disfrutar de la belleza de un espacio único», lamentan. La plataforma Mezquita Catedral, Patrimonio de Todos defiende la creación de un órgano compartido con la administración pública.